La marca, con 76 tiendas operativas, diseña, fabrica y comercializa productos de moda infantil desde tres meses hasta 16 años.
La enseña ha fijado ahora como
zona prioritaria de expansión Madrid, pues en esta comunidad se dan las características demográficas y económicas que coinciden plenamente con su perfil de consumidor. En este sentido, Chema Marín, director de expansión de Chiquiboy, apunta:
“aunque queramos consolidarnos y abrir nuevas unidades en toda España, estamos interesados principalmente en Madrid porque es un mercado muy afín a Chiquiboy”.
Otras zonas de gran interés para la firma son País Vasco, Cantabria, Castilla la Mancha y Castilla León y Andalucía, con especial interés en sus capitales de provincia.
Mediante este
plan de expansión, Chiquiboy quiere incorporar a su
red de franquicias a personas emprendedoras, con orientación comercial, que quieran implicarse como gestores en este proyecto. Aunque la experiencia previa en el sector no es necesaria (la central se compromete a proporcionarle un completo curso de formación al franquiciado), sí que es aconsejable tener cierto gusto y sensibilidad por la moda y el mundo infantil.
Chiquiboy, con sede y almacén central en Barcelona, cuenta con un equipo de diseñadores propio el cual se encarga de crear dos colecciones completas al año para los tres grupos de edad que constituyen el mercado de Chiquiboy: bebés de 3 a 24 meses, infantil de 2 a 12 años y júnior de 8 a 16 años. En cuanto al producto, éste se caracteriza por su alta calidad, diseño actual y por tener una excelente relación calidad-precio. Además, cabe destacar que todas las prendas de Chiquiboy están pensadas y diseñadas
para los niños y por eso respetan sus gustos y necesidades. De esta forma, la ropa será original, colorida y vistosa (con todos los apliques y detalles que les gustan a los más pequeños) pero también cómoda y práctica.
La inversión inicial aproximada para poner en marcha una tienda de Chiquiboy ronda los 22.000 euros y el aval bancario es de 12.000 euros.