El restaurante, que cuenta además con cuatro establecimientos propios en su ciudad de origen, prevé finalizar el año con nuevas aperturas en distintos puntos de la geografía y sumar otras cinco en 2012, alcanzando los 20 millones de euros de facturación.
La Rambla de Cataluña tiene desde el jueves un nuevo habitante: La Cueva de 1900, un restaurante que supone la primera apertura de la franquicia granadina en Cataluña, la octava fuera de Granada y la duodécima en todo el territorio nacional. Gracias a un modelo de negocio basado en la cocina tradicional , en la especialidad en jamones y embutidos, y la tapa gratis con cada consumición, la marca ha conseguido, en tan sólo cinco años, posicionarse entre las primeras de su sector.
La inauguración del restaurante de Barcelona tiene especial importancia en la estrategia de expansión, pues ha implicado también la incorporación del catalán a un material promocional que hasta ahora se ofrecía en español, inglés y francés, dando cobertura a la demanda de un público tanto nacional como extranjero. El turismo de Granada además ha favorecido que en las grandes ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia, ya se reconozca esta marca desde el primer día.
Son varios factores que han despertado el interés por el proyecto de La Cueva de 1900; entre ellos, destaca la innovación en sus productos, interpretada siempre desde la óptica de la cocina tradicional, que remite a los orígenes de la marca y que es uno de sus valores más importantes:
“Uno de nuestros objetivos es recuperar los sabores de la cocina tradicional, retomar las recetas y los procesos de elaboración clásicos. Nuestra innovación se basa, por ejemplo, en rescatar platos de toda la vida que ya nadie hace. Tanto los clientes que necesitan comer en la calle a diario como los turistas agradecen nuestra apuesta por fomentar los valores de nuestra tierra a través de la gastronomía. Podemos demostrar que en el mundo de la franquicia no está todo inventado, y que la comida de toda la vida también es franquiciable. Esto es un gran reto, pero lo estamos consiguiendo”, explica Emilio Rodríguez, director general de la franquicia.
En la oferta gastronómica de La Cueva de 1900 también tienen un papel relevante los productos estrella de la marca, especialista en jamones y embutidos de elaboración propia, sin olvidar los famosos guisos como habitas, rabo de toro, flamenquines, tomate aliñao, migas, o unos simples huevos con jamón