La dieta mediterránea, alimentos sanos y de calidad, es el objetivo de los restaurantes Iboo.
La cadena de restaurantes firmó ayer su primera franquicia y tiene previsto abrir 25 establecimientos en España en cuatro años, para después introducirse en el mercado internacional.
En el plan de negocio se contempla crear una red de veinticinco franquicias en cuatro años en Madrid, Barcelona y Valencia. Sin embargo, dado el éxito que ha tenido el restaurante piloto, que en septiembre facturó 81.200 euros, han decidido adelantar sus planes y han abierto su primera franquicia. En abril de 2005 esperan tener cuatro establecimientos abiertos.
Abrir uno de estos establecimientos, de 300 metros cuadrados y listo para empezar a trabajar, supone un desembolso de 370.000 euros, incluido el canon de entrada. Según los estudios de la empresa, el margen neto de beneficios es del 11%, ya que las franquicias trabajan con una cocina central que ahorra costes al canalizar todo el volumen de pedidos. Además, la facturación incial estimada es de un millón de euros, por lo que la inversión se puede recuperar en tres años.
En el menú podemos encontrar, junto al precio del plato, una tabla en la que se indican las kilocalorías, las proteínas y los hidratos de carbono de los alimentos que se van a consumir. En cuanto al precio, Restaurantes Iboo pretende no sólo ofrecer comida sana y rápida, sino también asequible.