La agencia matrimonial, cuenta con nueve delegaciones en Cataluña.
Samsara inició su andadura en Barcelona con un claro objetivo: ser el camino más corto para encontrar pareja estable, hace nueve años. El siguiente paso de esta agencia matrimonial, ha sido la puesta en marcha de su propuesta de franquicia, con la que aspira a trasladar su concepto desde el mercado catalán al resto de la Península Ibérica.
Su plan de desarrollo pretende implantarse progresivamente en todas las ciudades españolas que cuenten con una población de 500.000 habitantes o en poblaciones que alcancen esta cifra en su área de influencia.
El canon de entrada previsto varía entre los 18.000 y los 48.000 euros, dependiendo del número de habitantes que abarque la zona de exclusividad; el royalty de explotación también está relacionado con la cifra de población y la inversión total necesaria estriba en el canon de entrada más 18.000 euros para gastos de apertura y fondo hasta que se comiencen a generar beneficios.