La enseña de heladerías, ha inaugurado un nuevo establecimiento en Madrid, con un nuevo diseño.
Sus tiendas, que hoy en día suman un total de 100 en toda la península, se han adaptado a un diseño mucho más vanguardista.
En este novedoso diseño se han tenido en cuenta fundamentalmente cuatro factores clave: el ambiente, la comunicación, la viabilidad y, por supuesto, el servicio.
Se trata de una tienda de compañía, que permitirá a la firma ampliar los servicios que ofrece a sus franquiciados, en términos de formación, pruebas de producto…
Desde la incorporación en el 2000 de la tienda ubicada en Barcelona (en la Rambla de Cataluña) el diseño ha ido evolucionando y adaptándose a los diferentes formatos y tamaños de local, siguiendo siempre un objetivo: reforzar el posicionamiento de la marca en un ambiente que responda a las expectativas de los consumidores.