Tras dos años como empleada en un centro Naturhouse, Judith Tejedor, dietista de profesión, decidió quedarse con el negocio en el que trabajaba. Fue en 2005 y la experiencia fue tan buena que al año siguiente, abrió su segundo Naturhouse. Hoy, tras estos años de actividad, el balance de su relación con esta cadena de franquicias sigue siendo positivo.
Judith Tejedor González es Técnico Superior en Dietética y Nutrición y desde 2005 también empresaria. Esta joven emprendedora de 34 años se convirtió en 2005 en franquiciada de la cadena de reeducación alimenticia Naturhouse. “Después de dos años como empleada en un centro Naturhouse, decidí quedármelo y convertirme en empresaria y propietaria del centro”. La experiencia fue tan buena, explica Judith, que abrió su segundo Naturhouse al año siguiente.
Antes de que Naturhouse entrara en la vida de Judith, esta salmantina de 34 años trabajaba en el departamento Físico-Químio de un laboratorio. Pero tras entrar como empleada en esta cadena de franquicias del Grupo Kiluva, Judith tomó la decisión de emprender su propio negocio de manos de esta cadena. “Más que decidirme a abrir una franquicia, quise abrir un Naurhouse por el tipo de negocio y las condiciones. Es el modelo perfecto para el desarrollo profesional de un dietista”, destaca la franquiciada.
La dietética, su vocación
Judith siempre estuvo interesada en el mundo de la dietética, “de hecho mis estudios han sido encaminados hacia este sector e interactuar y ayudar a las personas me encanta”. Y destaca: “Naturhouse cuida el trato con el cliente, el trabajo bien hecho y, lo más importante, las dietas son equilibradas. El objetivo es que las personas no vuelvan a recuperar los kilos perdidos”.
Como franquiciada de la enseña, la función de Judith es la de Asesora Nutricional especialista en Método Naturhouse, “a parte de la gestión de pedidos, correcto estado de la tienda a todos los niveles o captación de clientes con las herramientas comercial-marketing de publicidad que nos ofrece la central de la franquicia”. Y es que la empresa, desde la Central, aporta a todos sus franquiciados “un gran apoyo a nivel técnico y de marketing, que nos refuerza a todos los niveles cuando lo necesitamos”.
Para convertirse en franquiciada...
Al tratarse de un traspaso, Judith invirtió unos 30.000 euros más o menos para convertirse en franquiciada de Naturhouse, “pero hoy en día puedes abrir una franquicia a partir de 10.000 euros”. Su tienda tiene 50 metros cuadrados y está ubicada en uno de los locales más visuales del centro de Salamanca. “Actualmente estamos dos dietistas, cada una en un turno de 6 horas al día, de lunes a sábado”.
Un ejercicio positivo
A la hora de valorar el ejercicio 2013, Judith lo tiene claro: “Desde luego que como a todos la crisis afecta, pero nuestros clientes confían en nosotros y seguimos trabajando en equipo con ellos para conseguir su objetivo en pérdida de peso. Mi balance del 2013 ha sido positivo, mejorable pero positivo, ya que hemos elevado nuestra facturación respecto al 2012”.