Carlos Conde es una franquicia de peluquería masculina que propone a los profesionales del sector un negocio atractivo con el que independizarse y crear su propio salón de peluquería, por una inversión asequible y con un concepto de actividad muy ajustado a las necesidades del gran público.
Carlos Conde es un concepto especializado de peluquería en franquicia, dirigida al público masculino con rapidez de servicio, precios competitivos y grandes profesionales que atienden las necesidades de los clientes con agilidad y diligencia en todos sus servicios. Los franquiciados reciben una completa formación que ayudará al profesional tanto en el conocimiento de estilos como en los tratamientos de estética, así como otros servicios ofrecidos al cliente como tintes, mechas etc. El resultado es una franquicia rentable e integral, al abarcar tanto servicios de peluquería como de estética para hombre muy demandados. No necesita un gran desembolso económico y se puede abrir en localidades pequeñas, a partir de 5.000 habitantes.