Las clínicas dentales de la marca Buba han comenzado a llamar la atención en la ciudad de Valencia, convirtiéndose en el fondo perfecto para selfies y fotos de instagram tal como se aprecia en la imagen adjunta.
Gracias a su más que llamativa y atractiva estética y su escaparatismo arriesgado, consiguen llamar la atención de toda persona que transita por las calles de la ciudad. Pero su escaparatismo no solo es llamativo a la vista, sino que transmite, en ese primer vistazo, lo que son estas clínicas, su punto fuerte: los implantes y las prótesis dentales.
Crear un concepto que te identifique de cara a tus clientes es el deseo de muchas de las empresas que nacen, y que al no encontrarlo, no consiguen calar en el mercado. Pero Buba lo ha conseguido en tiempo record, y no solo ha generado este concepto propio sino que ha encontrado la forma de comunicarlo a sus potenciales clientes, y todo en menos de 4 años.
Oscar Jiménez, director de Buba transmite a sus nuevos franquiciados este concepto, pero la fórmula ganadora no es instantánea, y como todo lo que se vuelve viral, debe reinventarse con frecuencia para seguir sorprendiendo e impactando al consumidor. Por ello, Buba siempre está a la caza de nuevas tendencias que guíen sus propuestas para seguir posicionándose a la vanguardia del sector.
Buba juega con varias ideas en los visuales de sus clínicas, en este momento, Valencia se rinde a sus escaparates con colores llamativos y con objetos relacionados con la odontología colocados de la forma más insospechada.
Buba ha conseguido lo que muchos buscan, ser objeto de objetivos.