Inditex ha presentado resultados semestrales, los primeros con Pablo Isla como consejero delegado, con la necesidad de convencer al mercado de la solidez del negocio tras la rebaja de previsiones practicada en junio.
Las cuentas vendrán acompañadas mañana de una conferencia con analistas, a celebrar a las 10 de la mañana. Inditex quiere convencer al mercado de que su modelo goza de buena salud después de las dudas que suscitó hace tres meses. Ya con Pablo Isla a los mandos, la textil presenta los resultados del primer semestre de su año fiscal, que no coincide con el natural y que termina a finales de julio.
El 13 de julio, al presentar resultados del primer trimestre, advirtió que algunos problemas con el cambio de la colección de mujer de Zara habían provocado el estancamiento de las ventas durante las primeras seis semanas del trimestre. La cotización cayó un 6,61% y, aunque desde entonces se ha recuperado, no será hasta mañana cuando los analistas puedan ver en negro sobre blanco el impacto de estos problemas en las cuentas.
La mayoría espera una reducción en el ritmo de crecimiento de beneficios sobre el 21% del primer cuarto de año, de forma que el balance semestral sea de un alza del 18% en resultados. Hay más dudas sobre la evolución de los márgenes.
Tras el susto de junio el entonces consejero delegado, José María Castellano, señaló que el negocio se recuperaría y los analistas, por lo general, confían en ello. 'La clave es si el error de principio de temporada fue o no un cambio de tendencia', señala a Bloomberg un analista de Credit Suisse. En Ibersecurities son más optimistas, y consideran que, incluso, hay posibilidades de que Inditex aproveche la actualización de las previsiones para la temporada de otoño invierno para revisar al alza las estimaciones de resultados en ese periodo.
La cotización, a los mismos niveles que en 2003
De susto en susto. La historia bursátil de Inditex en los últimos dos años ha sido la de un valor afectado por periódicas y violentas caídas en Bolsa, vinculadas siempre a expectativas no cumplidas. Estos sustos momentáneos se han comido de forma recurrente las revalorizaciones del valor, de modo que desde 2003 hasta ahora Inditex apenas sube un 8%, mientras el Ibex 35 casi ha duplicado su valor. La compañía mostró un espectacular comportamiento después de salir a Bolsa en 2001, pero precisamente eso la hizo muy sensible a las decepciones. El mercado esperaba -y espera- demasiado de ella, y el tener el listón alto multiplica el efecto en Bolsa de las malas noticias y reduce el de las buenas. Con todo, Inditex no baja. En este 2005 la compañía registra, pese a la fuerte caída de junio, una rentabilidad del 6,5%.