La mayoría de las inauguraciones se concentrarán en China, Taiwán, Corea y Japón, lo que supone pasar de 30.000 metros cuadrados de superficie de venta a 37.000 metros aproximadamente.
Esta decisión se enmarca dentro de la estrategia de expansión de la compañía que le ha llevado a contar ya con 100 establecimientos en los 13 mercados asiáticos, tras la incorporación este año de 10 nuevas tiendas en Corea, China, Malasia, Taiwán y Hong Kong.
El 10% de la facturación actual de la compañía procede de esta zona geográfica, pero la intención es que el peso específico del negocio asiático se eleve hasta el 25%.
Mango, que inició su expansión en Asia en 1995 con la primera tienda en Japón, desarrolla cada temporada una colección especial que se adapta a las necesidades climáticas y estéticas de estos mercados. Adicionalmente, en 2004 inauguró dos centros logísticos en Hong Kong y Singapur, que agilizarán la distribución y renovación diarias de producto en tienda.
La firma, que este año ha invertido en total unos 44 millones de euros en la apertura de un centenar de establecimientos, considera 'muy positivos' los resultados que ha obtenido hasta ahora con su expansión en Asia.
Mango registró el año pasado una cifra de negocio consolidada de 832 millones de euros, mientras las ventas de la cadena (tiendas propias más franquicias, sin IVA) se elevaron a 1.055 millones. El grupo ganó 73,1 millones.