Innovación para un producto tan tradicional de la gastronomía como los pollos asados. Le Coq by The Kikiri Co., que nace de manos de un equipo experimentado en el sector de la restauración y la franquicia, da un giro a las tradicionales tiendas de pollo a la brasa creando un innovador y atractivo concepto de tienda y restaurante. Su oferta, disponible para consumir en el restaurante o bien para llevar, se compone de pollos y otras aves asadas al horno de carbón, con diferentes salsas y recetas, además de una amplia variedad de complementos como alitas de pollo, croquetas, ensaladas, postres…
Le Coq by The Kikiri Co. llega a la franquicia con un innovador concepto que reposiciona y profesionaliza la tradicional tienda de pollos a la brasa de barrio. Dando una vuelta
de tuerca a este tradicional negocio, Le Coq trae la innovación a sus locales, que son a la vez tienda, restaurante y asador de aves a las brasas y que cubren con su oferta todas las franjas horarias, desde el desayuno hasta las cenas y las copas. “Atendemos a varios targets, centrándonos en jóvenes de 27 a 45 años, que buscan una oferta variada, equilibrada y saludable a mediodía y con ganas de disfrutar de una buena cena de noche, que valoran la calidad de los alimentos y servicio, especialmente entre semana. Luego, durante los fines de semana, el público más numeroso son las familias con hijos que quieren comer en un sitio informal, pero con un nivel de precios
justos”, explica Javier Casas, su director de Expansión.
Es un concepto de restauración informal y de calidad para todo tipo de público. Le Coq gusta, y mucho. Con un primer local propio en Madrid, en la calle Príncipe de Vergara, su equipo ha comprobado la buena respuesta del mercado y el buen funcionamiento de su modelo de negocio. La empresa, que inicia ahora su expansión, tiene grandes perspectivas de futuro. “Además de lo innovador del concepto, que reposiciona y profesionaliza la tradicional tienda de pollos a la brasa de barrio, el equipo está compuesto por profesionales de primer nivel en el sector de la hostelería y la franquicia, controlando especialmente las operaciones y el marketing de la restauración en cadena, pilares para la rentabilidad. Además, es un negocio innovador y basado en elementos factibles que exaltan la experiencia de la marca”, explica Casas.
CRECIMIENTO PLANIFICADO
De este modo, con un modelo de negocio probado y diseñado para que triunfe en todo el país, Le Coq acelera su crecimiento expandiéndose mediante el sistema de franquicias. Aunque quieren estar presentes en toda España, su objetivo más inmediato pasa por posicionarse en Madrid Capital y Comunidad,
aunque no descartan otras zonas. “Este año pretendemos terminar con 10 unidades de negocio”, explica su director de expansión.
El franquiciado ideal para este negocio de hostelería es aquel emprendedor con aptitudes para la gestión y control del negocio, con capacidad de trabajo en equipo y organizado, y que preferentemente esté dentro de la gestión o de la operativa del local. Por otro lado, también es una franquicia para inversores que cuenten con una persona de su entera confianza que cumpla los requisitos anteriores para la gestión del negocio.
La inversión mínima para abrir un local de unos 150-180 m2 es de 120.000 euros, con un canon de entrada de 25.000 euros.