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Paso a paso

Franquicias & Negocios

Averigua los pasos que has de seguir para abrir un restaurante

Buscar un buen local, formar un equipo de trabajo eficiente, vestir el establecimiento con el mobiliario adecuado... Son muchas las dificultades que el emprendedor que apuesta por el sector de la restauración tendrá que superar. Siguiendo algunas pautas es más sencillo llegar con éxito al esperado momento de la apertura.

¿Cuánto dinero necesito?, ¿qué licencias me solicitarán y dónde puedo conseguirlas?, ¿quién se encargará de las obras en el local? Estas y muchas otras cuestiones pueden asaltar al emprendedor que opta por abrir un restaurante. Un negocio para el que se requiere una inversión elevada, una media de entre 96.000 y 450.000 euros, pero que a la vez ofrece una alta rentabilidad y un plazo de amortización bastante corto, entre 1,5 y 3 años aproximadamente.

Aunque empezar de cero en esta actividad no es un proceso sencillo, sí que existen algunos pasos que pueden facilitar el camino. Una vez definido el tipo de negocio en el que se quiere invertir, se debe reflexionar sobre qué se necesita y cómo se conseguirá, para ver si lo que por el momento sólo conforma una idea de proyecto, se puede plasmar en la realidad.

Buscar un buen local
Si la ubicación del establecimiento y las características del local son aspectos fundamentales en la mayoría de negocios, para un restaurante resulta básico. Además de encontrar un espacio ubicado en una zona con afluencia de público, este debe cumplir una serie de condiciones para poder convertirse en un restaurante: aunque depende del concepto, la superficie del local ha de ser amplia, de como mínimo 100 m²; también ha de contar con una altura mínima, de unos 2,5 metros.

Uno de los principales interrogantes con los que se encuentra el empresario es ubicar el establecimiento en el sitio idóneo, decisión que debe ser estudiada con detenimiento ya que, una vez emprendida la actividad, condicionará la atracción de la clientela hacia la tienda y, por lo tanto, la rentabilidad del negocio. En más ocasiones de las que creemos, elegimos un restaurante frente a cualquier otro por su localización. Por ello es importante situar el local donde atraiga clientela y presente las mínimas limitaciones posibles.

Viabilidad técnica
No basta con encontrar un local amplio y bien situado, además este debe reunir una serie de características que lo hagan apto para la actividad. Por ejemplo, un punto fundamental para este sector es verificar, en el caso de que sea un restaurante con cocina, que el local tenga salida de humos.
Si el establecimiento cumple todas las exigencias requeridas, el ayuntamiento nos otorgará la licencia de actividades, lo que más tarde nos permitirá inaugurar el negocio.  
Llegados a este punto, se debe valorar la dificultad y el coste que supondrá implantar en ese local el concepto que se había pensado en un principio: adaptar el espacio a la imagen corporativa, incorporar el mobiliario, etc.
De aquí ya podríamos extraer una aproximación de la inversión que se necesitará y del endeudamiento al que se tendrá que hacer frente. Y este es el momento de buscar vías de financiación en las distintas entidades bancarias. Los profesionales del sector recomiendan que el emprendedor se endeude, como máximo, en un 60% respecto a la cantidad total que necesite.

El proyecto ejecutivo
Recoge todos los aspectos técnicos relativos al negocio y el primer punto para elaborarlo pasa por encontrar a un técnico que lo realice, ya sea un arquitecto, un ingeniero o un aparejador.
En el proyecto ejecutivo quedarán plasmadas todas las características del establecimiento: documentación gráfica del local (planos), definición de los materiales que se utilizarán, presupuesto, diseño de instalaciones, etc. Una vez terminado, el proyecto ejecutivo nos permitirá iniciar las obras. Basta con presentarlo en el ayuntamiento y que nos otorguen la licencia de obra.  

Manos a la obra
Lo primero es buscar un contratista que, siguiendo lo expuesto en el proyecto ejecutivo, se encargará de las reformas del local, siempre bajo supervisión tanto por parte del técnico que realizó el proyecto, como por el ayuntamiento, que puede hacer varias inspecciones a lo largo del proceso.
De forma paralela a las obras, se deben encargar el mobiliario, el stock inicial y el sistema informático. Existen empresas especializadas en estos aspectos (mobiliario corporativo, utensilios industriales para la cocina, etc.) y, por ejemplo, en el caso del mobiliario se puede encargar al mismo arquitecto que realizó el proyecto.


Buscar al personal y formarlo
Una vez preparado el local, llega el momento de enfrentarse a uno de los ‘handicaps’ del sector: buscar al personal. La escasez de personal cualificado es uno de los principales problemas  que se encuentra el empresario que decide invertir en un restaurante. Tendrá que buscar y seleccionar a las personas que formarán su equipo de trabajo, para lo que puede recurrir a empresas especializadas.

La esperada inauguración
Antes de lanzarse a inaugurar el nuevo negocio, es necesario una primera apertura de rodaje durante la que, por primera vez, se pondrá en práctica lo que se lleva planeando durante meses: las instalaciones, el personal, los utensilios...
Al cabo de una o dos semanas, y tras lanzar la campaña publicitaria que dará a conocer nuestro negocio, llega el gran día. Para el día de la inauguración se puede preparar algún evento: una fiesta inaugural, alguna promoción... para llamar la atención de los potenciales clientes.
Ya hemos abierto el restaurante y ahora es cuando empieza la ‘cuenta atrás’; tras superar un largo y arduo proceso, es el momento de cuidar la gestión del negocio en el día a día.