Conoce las cuestiones típicas que se plantea cualquier emprendedor al montar una franquicia.
Preguntas frecuentes al comprar una franquicia
¿Es la franquicia una fórmula segura?
Una franquicia es un negocio y como tal no está exento de riesgo. De todas formas con la franquicia nos aprovechamos de la experiencia desarrollada por el franquiciador en el negocio, con lo que las posibilidades de tener éxito son sensiblemente mayores.
Algunos estudios indican que frente a un porcentaje de fracaso del 80% en los negocios individuales dentro de los primeros 5 años de actividad, los negocios franquiciados tienen una tasa de fracaso del 40 al 10%. Por lo tanto sin garantizarnos el éxito la franquicia reduce las posibilidades de fracaso.
¿Cuánto dinero tengo que invertir como franquiciado?
La capacidad de inversión condicionará el tipo de franquicia a las que podrás acceder. No se trata únicamente de poder alcanzar la inversión inicial, sino de que te sientas cómodo arriesgando esa cantidad. Debes ser precavido respecto a un comienzo más flojo de lo esperado, sin que ello afecte demasiado a tu capacidad de tomar decisiones.
Aunque existen más de 3.000 franquicias, con inversiones que van desde los 3.000 € hasta los 100 millones de euros (caso de una tienda de Ikea), desde un punto de vista práctico debes ser capaz de invertir un mínimo de unos 30.000 € para arrancar un negocio. Por debajo de ello las opciones van ser tan limitadas que la franquicia no es una opción viable.
Quizás te estás preguntando si la franquicia es una fórmula adecuada para ti. Incluso si encuentras una empresa en la que a la mayoría parece irles bien, ¿va a funcionar contigo?
Por una parte, un franquiciado es un emprendedor, y por lo tanto debe tener madera de empresario:
- Confianza en si mismo
- Capacidad de tomar decisiones.
- Habilidad comercial.
- Capacidad de afrontar la inversión inicial.
- Disposición de trabajar duro para levantar el negocio.
- Caparcidad para realizar el trabajo que necesita el rol del franquiciado en el negocio.
Y por otra una franquicia supone limitar tu autonomía y seguir las directrices del franquiciador. Esto requiere una actitud proactiva y ser capaz de trabajar en equipo. Por lo tanto debes sentirte cómodo con tu papel de franquiciado:
- ¿Será el negocio suficientemente interesante con el tiempo?
- ¿Puedo aceptar la disciplina que comporta un sistema de franquicia?
- ¿Puedo comprender la autoridad del franquiciador?
- ¿Tendría mejor resultado montando un negocio independiente?
¿Cuál es la mejor Franquicia?
La respuesta a esta pregunta siempre es depende. Va a depender de la localización, de las características del entorno, etc. Pero fundamentalmente va a depender del franquiciado, de sus características personales y de sus habilidades, y sobre todo de que pueda sentirse cómodo en el negocio y le permita desarrollar sus capacidades.
La elección de una franquicia debe partir de un auto-análisis sobre las propias capacidades, preferencias y los objetivos a largo plazo que se tienen con el negocio.
¿Cómo me puede ayudar un consultor?
Unirse a una red de franquicias supone un paso decisivo en el que se van a invertir considerables ahorros, tiempo e ilusión. Por todo lo que está en juego, es importante tomar la decisión bien asesorado y respaldado por una opinión profesional. Si vas a invertir alguna cantidad a partir de 5 millones de pesetas en una franquicia, bien puede ser útil destinar un pequeño porcentaje (quizás el 1%) en asegurarte que la oportunidad es tan buena como parece.
Los consultores podrán ayudarte a seleccionar franquicias que mejor se adaptan a tus preferencia, investigar sobre la franquicia y el franquiciador, realizar el plan de negocios personalizado, revisar el contrato, etc.
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