La enseña de restaurantes de comida mediterránea, opera con cocina centralizada, lo que hace mucho más ágil su gestión.
Sus locales mejor ubicados alcanzan, cada año, casi los 2.000.000 euros en ventas. Hablamos de El Racó, concepto de restaurantes de comida mediterránea, que se está posicionando en el mercado, apostando por un desarrollo consolidado y estable.
Han comprobado el éxito del concepto en sus primeros locales. Algunos de los puntos fuertes de El Racó pasan por estar siempre pendientes de su oferta, fortaleciéndola, y procurando que siempre esté vinculada a las tendencias más actuales y a los gustos del consumidor. Trabajan con paso firme. Su última apuesta, iniciada en los dos últimos locales que la cadena ha inaugurado (Barcelona y Terrassa) ha sido renovar por completo la imagen de los restaurantes, dotándolos de un aire moderno que se adapta a la perfección a las últimas tendencias en el campo del diseño: ambientes minimalistas decorados en tonos luminosos y acogedores.
El Racó permite a sus clientes comer de forma variada, alimentos de calidad y a un precio competitivo. La oferta es amplia. No en vano, El Racó agrupa cinco conceptos en uno; en los establecimientos de El Racó se puede consumir una amplia oferta de calidad de ensaladas, pastas, pizzas, carnes y crêpes. De esta forma, y gracias a la diversificación que presenta su cocina, El Racó logra fidelizar a su clientela. El Racó dispone de una cocina central donde preelabora los distintos platos de la carta facilitando el trabajo en los establecimientos; además, dispone de un departamento de I+D que se encarga de dotar de imaginación los distintos platos que se consumen, tanto en la elaboración de los productos como en su denominación.