Sumarse a esta cadena de moda premamá es accesible.
Y es que Mummy intenta facilitar la entrada a nuevos franquiciados eliminando los pagos de royalties y canon de publicidad. Por alrededor de 40.000 euros, canon de entrada incluido, los emprendedores pueden entrar en un nicho de mercado poco explotado de la mano de una empresa con una sólida experiencia.
Algunas de las bazas con las que cuenta Mummy son sus diseños propios, modernos, de calidad y a un precio asequible en un sector en el que existe poca competencia. Mummy cuenta con 12 tiendas propias y ocho franquicias repartidas por prácticamente toda España. Valladolid ha sido, en el mes de junio, la ciudad elegida para abrir un nuevo establecimiento. Los próximos destinos de Mummy son Cuenca, Úbeda y Denia, lugares a los que llegará en los meses de septiembre y octubre. La enseña se marca un ritmo de siete aperturas anuales, hasta alcanzar una red de 70 franquicias. Además, ya estudian la posibilidad de llegar al mercado portugués.
Importantes planes de desarrollo de una cadena que se posiciona como la única franquicia del sector de ropa de premamá. Mummy ofrece productos exclusivos, ya que ellos mismos diseñan y producen sus colecciones. Sus precios asequibles y sus productos modernos y de calidad diferencian a esta cadena del resto de empresas del sector. Y ahora Mummy suma un nuevo valor añadido: aunque su producción se centra en la ropa de premamá, la firma ha incorporado una colección de moda de bebé.