El grupo textil gallego ha obtenido un beneficio neto de 393 millones en la primera mitad de su ejercicio fiscal, un 33% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior y por encima de las estimaciones de los analistas consultados por la agencia Reuters, que esperaban que la compañía ganara 377 millones.
La facturación ha crecido un 19% entre febrero y julio, hasta 4.124 millones, también sobre las previsiones de los expertos gracias al sólido crecimiento de las ventas de su principal marca, Zara, que ha ingresado un 15% más, hasta 2.700 millones.
Otras marcas, Bershka o Massimo Dutti, han aumentado su facturación un 27% y un 18%, respectivamente, mientras que la última apuesta del grupo, Zara Home, ha disparado sus ventas un 50%.
El incremento de las ventas comparables ha sido del 7%, en un semestre en el que Inditex ha abierto 205 nuevas tiendas.
El resultado de explotación antes de amortizaciones (ebitda) ha mejorado un 29%, hasta 782 millones, mientras que el margen bruto ha mejorado un 20%, hasta 2.300 millones o el 55,7% de las ventas. Este indicador, que refleja el control de los costes, se situó en el 56,4% en el primer trimestre y en el 54,9% el año pasado.
Inversión
El vicepresidente y consejero delegado de Inditex, Pablo Isla, ha declarado que la inversión del grupo textil prevista para 2007 estará comprendida entre los 900 y 950 millones de euros, dedicados en gran medida a la apertura de nuevos establecimientos de la cadena.