Una inversión reducida y una rentabilidad elevada convierten a las enseñas financieras en una oportunidad de negocio.
Se necesita una inversión reducida para poner en marcha el negocio y el dinero que se emplea al inicio de la actividad se recupera en poco tiempo. De esta forma, las enseñas de intermediación financiera facilitan a los emprendedores la entrada en un segmento de mercado que presenta un elevado potencial de crecimiento en nuestro país.
Es el caso de Hipotk, enseña de intermediación financiera que opera en franquicia desde hace dos años. Hipotk ofrece un concepto de negocio para el que basta con una inversión de alrededor de 45.000 euros, importe que se recupera al año de haber iniciado la actividad, siempre que se implemente el Know-How de la empresa: “Si los franquiciados hacen lo que se les enseña en los cursos de formación –añade Lluís Parellada, Presidente de Hipotk- tendrán éxito y podrán recuperar su inversión en poco más de un año de iniciar el negocio”. “En Hipotk nos acercamos a las entidades financieras y les solicitamos financiación para los proyectos de nuestros clientes, tanto si se trata de comprar una primera o segunda residencia, como si lo que se busca es agrupar las deudas en una sola cuota. También atendemos las necesidades de empresarios, con respecto a sus necesidades financieras, tales como pólizas de crédito, descuentos de papel, créditos ICO, etc.” Parellada define de este modo los servicios que presta la enseña.
Para poner en marcha una oficina de Hipotk basta un local de 50 m². Además, las necesidades en cuanto a equipamiento son reducidas, con lo que se reduce de forma importante la cantidad de dinero para iniciar el negocio. Unirse a Hipotk es apostar por un negocio rentable que, además, opera en un mercado con un gran potencial de crecimiento.