¿Reaccionar o esperar? Si tiene una empresa, ahora es el momento para sentar las bases para el futuro. La situación económica actual invita a reflexionar pero, también, a buscar los recursos necesarios para posicionarse y estar bien preparados para cuando todo pase
Con noticias tan poco halagüeñas como las que proliferan actualmente en el mercado empresarial, no es de extrañar que muchos empresarios hayan decidido echar al freno al crecimiento y permanecer atentos, sin mover un dedo, ante los cambios que suceden en el sector.
En tiempos revueltos
Son tiempos revueltos. Y en estos momentos el concepto ‘invertir’ permanece relegado de las acciones propias del ámbito empresarial; desterrada como herramienta para el desarrollo de un negocio al menos hasta que amaine el temporal. Pero ¿es esa la mejor opción?
Está claro que en un momento como el actual no conviene lanzarse a la creación de grandes proyectos empresariales, ni tampoco es tiempo de probar nuevas ideas que no estén bien atadas o de dar pasos inseguros. No obstante, si que es el momento propicio para plantearse como uno mismo puede sortear las dificultades, esquivar las complejidades que entrañan esta situación y hacer que, simplemente, nos roce sin apenas alterarnos.
Dar pasos hacía adelante
¿Cómo se puede conseguir? Sin dejar de dar pasos, de observar; de, en definitiva, allanar el camino por el que nos adentrarnos una vez que la situación se restaure de nuevo.
En un momento tan sensible, económicamente, como el que estamos atravesando, es cuando los empresarios tienen que pensar en avanzar y dar un paso hacía adelante. Incluso podríamos decir que ahora es casi determinante que esta decisión se tome, y que se haga en sentido positivo ya que existe el peligro de que si no se reacciona a tiempo, el empresario pueda quedar a merced de la coyuntura económica, desligándose de la realidad.
La franquicia como solución
De cara al año próximo hay que ir extendiendo la red que nos servirá de soporte para crecer. En este sentido, la franquicia es una gran apuesta para el desarrollo empresarial de un concepto. Un sistema donde el riesgo es compartido. En estos momentos, apostar por expandirse en franquicia puede convertirse en la decisión acertada ya que la situación que nos envuelve nos obliga a ser más restringidos a la hora de declinarnos por aventuras empresariales poco sólidas. Por otra parte, no tomar partido, no moverse puede ser fatal para una empresa, que perderá competitividad, haciéndose más pequeña frente al mercado y quedando sus capacidades muy mermadas cuando el momento económico cambie y toque ponerse a trabajar.
Evitar los errores
¿Qué se puede hacer para evitar cometer errores graves? Plantearse un canal de venta directo. Para ello, FDS Consulting ha lanzado una línea con el fin de ayudar a los empresarios en el lanzamiento y la puesta en marcha de estos proyectos sin necesidad de realizar una gran inversión. De hecho, por el coste de un sueldo, una empresa puede llegar a tener un proyecto bien atado para comenzar a expandirse en el año 2009 en el mercado de la franquicia.
El objetivo es reaccionar a tiempo. Atesorar para el día en que se instale la época de bonanza, estar preparado para ello. Y la mejor manera de hacerlo es buscando algo por uno mismo, diferenciándose de la competencia, valorando las posibilidades que se tienen para crecer y escapar de esta situación revuelta.
Las grandes semillas de negocio se trabajan en momentos en que la coyuntura económica no es propicia porque es el momento en que se agudiza el ingenio. Y, es entonces, cuando los más profesionales encuentran soluciones diferentes que les llevan a posicionarse en el mercado, resituándose para iniciar el año 2009 creciendo.