Las franquicias RockGym son un nuevo concepto de gimnasios. Una nueva forma de entender el deporte unida al más puro Rock and Roll. Porque para hacer deporte no hace falta sumergirse en rutinas pesadas y difíciles de mantener. RockGym hace divertido el simple hecho de ir al gimnasio a sudar la camiseta como si fueras al concierto de tu grupo de rock preferido.
Su sistema de entrenamiento personal, exclusivo y contrastado se basa en amplias y espectaculares instalaciones, con máquinas de última generación y música en vivo para entrenar. La franquicia organiza sus propios conciertos para que entrenar sea divertido. La expectación y el éxito de convocatoria de los centros es única en el sector.
Con una inversión aproximada de 500.000 euros y un local de unos 500 m2 puedes montar tu propio gimnasio. Con novedosos protocolos de entrenamiento, máquinas de última generación con conexión a internet y entrenamientos interactivos para los usuarios. Clases colectivas diseñadas en exclusiva y trainers especializados con APP propia.