Tras el inicio de nuestra andadura en 2010 con la comercialización de prendas de vestir infantil, y con la previa realización de un estudio inicial de mercado, pudimos comprobar in situ la gran aceptación que tuvieron nuestros productos.
En vistas a dichos resultados, antes de finalizar el año se inauguraron dos nuevos establecimientos. El test resultó, igualmente, satisfactorio y confirmó que tanto el segmento elegido como el posicionamiento adoptado, eran correctos. A partir de esta evidencia, desarrollamos nuestro proyecto de franquicia.
Entre múltiples definiciones de franquicia, La Ormiga, escoge la siguiente: “Un éxito probado y transmisible que puede ser reproducido por el franquiciado en su área geográfica”.
Nuestra empresa tiene una clara misión de crecimiento y un objetivo estratégico de poder ofrecer a medio plazo nuestros productos a toda España y a largo plazo realizar una expansión fuera de nuestras fronteras.