Ángel Allué, Director General de Comercio Interior, cesa en el Consejo de Ministros, y será sustituido por Teresa Sáncehz Armas. El polémico texto de la nueva ley de distribución comercial está en fase de enmiendas en el Congreso y será día clave el próximo 2 de setiembre. La AEF está trabajando duramente para aportar mejoras al texto.
El sector de la automoción echará de menos a Ángel Allué, el director general de comercio interior responsable de haber negociado con las patronales de fabricantes (Anfac) e importadores (Aniacam), por un lado, y las dos de concesionarios, Faconauto y Ganvam, por otro, un pacto de buenas prácticas para el sector y el texto de la ley de distribución comercial que tanta polémica ha generado en los últimos meses. Su cese será aprobado, probablemente hoy, por el Consejo de Ministros.
Fuentes del entorno de Allué explican a CincoDías que el cese se debe al propio deseo del director general de reincorporarse a su antiguo cargo de inspector de trabajo, concretamente a la Unidad Central a las órdenes del actual ministro Valeriano Gómez. No obstante, Allué podría estar sopesando pasarse al sector privado, concretamente al campo jurídico. Estas mismas fuentes descartan que la sustitución sea producto de un posible malestar por la evolución de la ley de Contratos de Distribución Comercial de cuya negociación y redacción ha sido responsable.
Entre los candidatos a sustituir a Allué, la que más probabilidades tiene es Teresa Sánchez Armas, actual número dos de la dirección general al desempeñar el cargo de subdirectora general de Comercio Interior. Previsiblemente este mismo lunes tomará posesión de su cargo.
Muchos sectores afectados
Sánchez Armas ha estado muy presente en las negociaciones entre fabricantes y redes de distribución para el pacto de buenas prácticas en la automoción y la elaboración de la ley de contratos de la distribución que afecta, además de a la industria del automóvil, a otros sectores como gasolinera, franquicias, grandes almacenes o quioscos de prensa, entre otros. Es, pues, una buena conocedora del texto actualmente en trámite de enmiendas en el Congreso.
El ministro de Industria, Miguel Sebastián, reconoció a primeros de agosto que con el adelanto electoral era muy difícil que el texto pudiese llegar hasta el BOE. Con toda probabilidad es una de las leyes en trámite parlamentario que no tendrán tiempo suficiente para ser aprobadas antes de que se disuelvan las Cámaras.
No obstante, desde el Ministerio de Industria confían en que los grupos parlamentarios, especialmente CiU y PNV, apoyen el texto. De ser así, consideran que el mes de septiembre sería suficiente para pasar todos los trámites a tiempo.
El 2 de septiembre, fecha clave para el texto legal
Fuentes parlamentarias consideran que la Ley de Contratos de Distribución Comercial tiene pocas oportunidades de ser aprobada en Cortes antes de la disolución de las Cámaras. No obstante, el Grupo Socialista está negociando con los otros grupos y, en especial, con CiU y PNV para conseguir un consenso antes de que finalice el plazo de enmiendas el próximo 2 de septiembre. Solo un acuerdo político de apoyo al texto tal y como está salvaría la ley, pues si los grupos pretenden debatir en profundidad las enmiendas sería imposible llegar al acuerdo, pues de momento hay 170 presentadas.
Dos de los puntos más polémicos de las enmiendas estriban en el pago de la indemnización fijado según volumen de ventas y la retroactividad de la ley para los contratos ya firmados.