Por el trato recibido, el buen precio de la franquicia pero sobre todo, por la cercania que ésta la demostró durante todo el proceso, así fue como Ana Olalla, franquiciada de Empress en Alcobendas (Madrid), se decantó por esta actividad.
¿Qué supuso esa cercanía y este trato para esta franquiciada? Todo. ya que fue el elemento diferencial que le hizo decantarse por este negocio y, que le ayudaron a tomar la decisión final. "Me dio más confianza y cercanía con respecto a los franquiciados que no otras. Además de un buen trato personal que valoré y valoro", matiza la nueva franquiciada. Este aspecto no es baladí, ya que confiar en una relación contractual de la que ambas partes quieren y deben salir beneficiadas es la raiz de todos los posibles éxitos. Para Ana Olalla esta relación fue "excelente" desde el comienzo: la formación fue crucial y su percepción de que las técnicas recibidas le serían muy útil en su día a día "recibo apoyo por parte del franquiciador siempre y sin excepción".
Todo esto se fue confirmando a medida que avanzaba el tiempo y se tomaban decisiones en relación al negocio. De hecho, Empress ofrece cierta libertad de acción que Olalla valoró sobremanera: "Creo que está muy bien poder decidir ciertos aspectos de tu negocio sin casi límites".