Javier Llorens y Gonzalo del Barrio tienen tres franquicias de la cadena de estética Centro Único en los centros comerciales de La Vaguada, Xanadú e Islazul, en Madrid. Estos empresarios han contado con el apoyo de Avalmadrid para abrir sus franquicias. Nos cuentan su experiencia.
¿Cuándo empezaron a considerar la idea de montar un nuevo negocio?
Javier Llorens: Tanto Javier como yo llevábamos toda nuestra vida profesional trabajando desde el lado del franquiciador y con una larga experiencia en multinacionales. Juntos consideramos la opción de aprovechar todos nuestros conocimientos para crear nuestro propio negocio. Por esa razón nos decidimos a empezar a analizar el mercado, ver posibles sectores de crecimiento y escoger a nuestros ‘socios’ de aventura. El periodo de estudio y análisis de sectores duró 4 meses. Evaluamos muchos sectores y muchas compañías franquiciadoras. Una vez decididos por el sector, la fase de elección del franquiciador nos llevó 2 meses hasta que conseguimos todos los datos necesarios para tomar la decisión y escoger a Centros Único. Para nosotros estuvo claro desde el principio que queríamos franquiciarnos. Tal vez el conocer desde dentro el funcionamiento de muchas franquicias nos decidió a buscar la ayuda de un experto (el franquiciador) para ayudarnos a abrir un negocio en un sector que para nosotros era desconocido. Veníamos del mundo de la restauración y retail y la medicina estética suponía un reto para nosotros.
¿Es más fácil constituirse como franquiciado?
J. LL.: Evidentemente es más fácil constituirse como franquiciado ya que tienes la ayuda del franquiciador que comparte contigo su knowhow y se minimizan algunos riesgos en la puesta en marcha del negocio.
¿Cuáles eran sus necesidades de financiación cuando acudieron a Avalmadrid?
J. LL: Para poner en marcha nuestros tres centros de medicina estética necesitábamos financiación para costear las inversiones en maquinaria, canon de franquicia, obra civil y mejoras del local. Como todo emprendedor hicimos nuestra ronda de presentaciones en varios bancos los cuales nos dijeron que confiaban en el negocio, en los promotores, pero que exigían unos avales, garantías hipotecarias o unas pignoraciones elevadas. Dentro de esa búsqueda de financiación tuvimos la oportunidad de presentar nuestro proyecto a Avalmadrid. Nos pidieron que siguiéramos un proceso de evaluación del proyecto muy bien estructurado, aportando una documentación básica sobre nuestra sociedad y bienes y se convirtieron en avalistas de las operaciones de crédito frente al banco que habíamos escogido. Otro servicio que nos ofreció Avalmadrid es el aval de rentas para los centros comerciales. En este caso Avalmadrid nos ha concedido un aval frente a los propietarios del CC La Vaguada y Xanadú. Hemos de destacar la rapidez de toda la operación ya que en un plazo de cinco semanas tuvimos preparado el crédito para poder ser formalizado con el aval de Avalmadrid. Avalmadrid ha jugado un papel vital para nuestra empresa, propiciando que hayamos podido abrir nuestros tres centros de medicina estética y haber podido crear 32 puestos de trabajo.
¿Cree que Avalmadrid puede ser de utilidad para las franquicias?
J. LL.: Sí, desde nuestra experiencia lo consideramos muy útil e incluso en nuestra futura expansión seguirá siendo un pilar en el que apoyarnos. Uno de los mayores problemas al que se enfrenta hoy un emprendedor o alguien que quiere ampliar su negocio es el acceso a la financiación. Cualquier franquiciado o emprendedor que esté considerando abrir una franquicia debería tener presente a Avalmadrid.