La empresa de restauración inspirada en los cafés tradicionales, presenta la amplia oferta gastronómica de sus establecimientos pensada para degustar a cualquier hora del día.
La carta se ha dividido en tres secciones: buenos días (incluye diversos tipos de desayuno), buenas tardes (comidas y meriendas) y buenas noches (cenas y copas).
Buenos días ofrece una amplia selección de desayunos típicos (extremeño, andaluz, campesino…) Asimismo la enseña se ha adaptado a las nuevas tendencias y ha incluido novedades como el desayuno light o el americano. Además para esta hora del día hay una gran variedad de bollería y repostería.
Para el aperitivo y la comida el cliente puede elegir entre comidas ligeras como ensaladas, sándwiches, cremas… o platos típicos de las distintas regiones españolas: migas, estofado de venado, ibéricos, quesos y una gran variedad de productos dulces para la merienda como tortitas con nata, tartas, batidos, etc. La sección de buenas noches presenta una gran variedad de bocatines, revueltos y tortillas, raciones, tostas, etc.
Aunque sin duda el producto estrella de la casa es el café. En los establecimientos de la firma sus clientes pueden disfrutar del mejor café del mundo en las mejores condiciones. Los responsables de la enseña se felicitan por elaborar la “taza perfecta”.
El objetivo de Gran Café es adaptarse a las necesidades de sus clientes en cada momento del día, a través de una oferta sencilla y de productos caseros, muy en la línea de su filosofía de empresa que trata de recuperar el sabor de lo antiguo.
Para instalar una franquicia de Gran Café es necesario hacer una inversión de 150.000 euros para locales de más de 100 m², situados en las zonas comerciales de localidades con un mínimo de 20.000 habitantes.