La última apertura de la enseña en Gijón y las que se acaban de producir en Oviedo y La Felguera indican una nueva zona de expansión.
Ya no solo el verde asturiano va a ocupar el paisaje de los concejos del principado. Con los últimos coletazos del verano, el principado se está contagiando del colorido que El Rincón de María lleva hasta los hogares desde que iniciase su actividad hace algo más de un año.
Desde el comienzo de su sorprendente progresión, la joven empresa murciana ha apostado muy fuerte por la zona norte de España como una de sus zonas preferentes para expandirse. La primera implantación que se produjo fue la de Ferrol (A Coruña) y desde entonces se han sucedido las aperturas en torno a la cornisa cantábrica. En la ciudad coruñesa se dio el pistoletazo de salida y a aquella apertura le siguieron las de un Centro Comercial de Mieres (Asturias) y finalmente Gijón, que con 850 m² se configura, por el momento, como El Rincón de María de mayor envergadura.
Sin embargo, estas aperturas tan solo indican para la empresa lo mismo que un punto y seguido. Y es que desde la central se han anunciado las dos últimas aperturas en muy poco tiempo. Una de las nuevas plazas ocupadas serán las de La Felguera que se encuentra dentro del concejo asturiano de Langreo; una localidad que supera los 20.000 habitantes para los que se ultiman los detalles de los 150 m² de exposición con los que se espera abrir al público en breve. Para culminar la campaña de verano, que en principio se presupone como una de las temporadas de más baja actividad franquiciadora, la enseña murciana destaca la buena acogida que ha tenido su modelo de negocio en Oviedo. En ésta ciudad los resultados de las primeras semanas reflejan una muy buena aceptación entre los ovetenses. En este caso son aproximadamente 300 m² destinados al menaje de hogar, la decoración y una amplia variedad de complementos tanto para caballero como para señora, sin descuidar al mismo tiempo el segmento juvenil de la población.