Blackpier, que se creó en 2010, se centra ahora en abrir tiendas propias para dar paso a continuación a su expansión a través de franquicias, llevando su modelo empresarial a todo el territorio español.
Se trata de un negocio de moda para hombre que huye de la fabricación de prendas en cadena, ofreciendo piezas exclusivas, de diseño propio y a medida, con patronajes personalizados y detalles adaptados a cada cliente. Y todo con precios asequibles, con los que llegan a un amplio target.
La marca tiene una imagen impecable, sus tiendas están perfectamente diseñadas para que el cliente viva una excelente experiencia de compra.
Con todo ello, el concepto de negocio de Blackpier ha demostrado su éxito en el mercado, registrando una gran aceptación por parte del público. Esta buena marcha del negocio se ha comprobado tanto en sus tiendas físicas como en su tienda online.