Esta franquicia se inició en Portugal en el año 2005, dentro de un ambiente subdesarrollado y donde este modelo de negocio no era muy conocido, dando una nueva visión de la estética y belleza.
La idea era dar mayor accesibilidad a los tratamientos de depilación permanentes, como la fotodepilación y fototerapias, de la mano de profesionales especializados a precios realmente accesibles a sus clientes.
En los últimos años ha tenido un crecimiento notable, con presencia además de Portugal en Brasil y Polonia; más de 70 clínicas en total. Cuentan con un historial de más de 200.000 clientes.