Inspectores Profesionales de la Vivienda es un negocio actual, sin competencia y rentable que se amortiza en el primer mes y con el que llegas a toda la población. Se trata de una franquicia low cost que convierte a los emprendedores en profesionales preparados para emitir el Certificado IPV, que es el documento que acredita el estado, funcionamiento y saneamiento actual y real de una vivienda.
Cómo trabaja el Inspector Profesional de la Vivienda (IPV)
Al adquirir la Franquicia IPV te formarás como Inspector Profesional de la Vivienda (el curso de formación ya está reconocido por la MEC) y podrás crear un negocio único, innovador, de gran prestigio, muy rentable. De esta manera pasarás a ser miembro de la Asociación ASIPV, organismo que se encarga de regular, controlar y trabajar incansablemente por obtener el reconocimiento de la profesión (actualmente se encuentra en un anteproyecto de Ley).
El IPV desarrolla su petición de certificado IPV mediante un informe escrito y fotográfico, siempre antes de efectuarse cualquier operación inmobiliaria; aunque hace poco que este sistema se ha implantado en España, en los EEUU se está aplicando con gran éxito en operaciones inmobiliarias desde 1960 como medida de seguridad y actualmente en los principales países del mundo.
A quién se dirige el negocio
Usted puede ser Inspector de la vivienda IPV, si tiene conocimientos en arquitectura, construcción, comerciales o experiencia demostrable en el sector inmobiliario, y se considere una persona con iniciativa, emprendedora e ilusionada, con ganas de triunfar y obtener el éxito profesional.