El Grupo de empresas Juan Gargallo responde al compromiso de una familia, a lo largo de nueve décadas y cuatro generaciones, con la Calidad. El origen de la tradición artesana familiar se remonta a los primeros años del siglo XX en Teruel. Fue entonces cuando comenzaron a dedicarse las primeras generaciones de la familia Gargallo a la elaboración y el comercio de jamón y embutido.
Después de cuarenta años de exitosa experiencia en el sector, desde la inauguración del primer establecimiento, el Grupo Juan Gargallo evoluciona con una nueva línea de negocio que presenta a partir del año 2003: Jamones Juan Gargallo-La Bodega.
Se trata de una franquicia de suministro. Nuestro objetivo es que nuestros franquiciados puedan ofrecer al público la misma calidad y servicio que nuestros establecimientos propios. Para ello asumimos el compromiso de suministrar los mismos productos y al mismo precio de costo que a nuestros propios establecimientos.
Los establecimiento Jamones Juan Gargallo-La Bodega son centros de degustación y venta de alta charcutería. En ellos se podrá disfrutar de la compra asesorada de producto selecto y también de la degustación de éste en desayunos, almuerzos, comidas y cenas. El jamón, los quesos, los embutidos ibéricos, los ahumados... serán también los protagonistas en el plato, acompañados de ricos y cuidados vinos y cavas.
Existen en el mercado muchos establecimientos franquiciados, dedicados a la restauración, pero son pocos los que ofrecen la venta asesorada de alta charcutería. Y posiblemente estemos ante un caso único en el que se combina: alta charcutería, degustación y producto de elaboración artesanal suministrado desde el propio secadero de Jamones Juan Gargallo.