Pilar Andrade es, desde el mes de enero, la nueva presidenta de la Confederación de Jóvenes Empresarios (CEAJE). Esta empresaria zaragozana guía las metas de esta confederación: fomentar el emprendimiento y apoyar a los jóvenes empresarios.
Desde enero te encargas de la presidencia de CEAJE. ¿Con qué objetivos afrontas este cargo?
P. A: Mi objetivo es trabajar en pro de las dos misiones que tiene CEAJE. Por un lado, despertar la vocación empresarial de los jóvenes, y por otro dinamizar a las empresas más jóvenes. Para ello ofrecemos formación permanente en todo tipo de temas relativos al emprendimiento y a la empresa, temas que no se estudian en las universidades. Somos un canal de comunicación permanente para los jóvenes emprendedores y empresarios. Desde CEAJE, creamos un entorno empresarial para que nuestros asociados (más de 18.000) encuentren clientes.
Nos encargamos de poner en contacto a las 56 AJES territoriales y analizamos los problemas comunes que se encuentran los jóvenes, por ejemplo trabajamos para terminar con las trabar burocráticas.
Tratamos también el tema de la innovación, intentamos trasladar al más alto nivel las inquietudes de los jóvenes empresarios y tratamos de provocar al Gobierno para que actúe, por ejemplo lanzando la ley de emprendedores. Necesitamos esta ley, que sea un cordón que hile todas las medidas que se lanzan desde la Administración. Hay que potenciar leyes que no desfavorezcan a los jóvenes empresarios, por ejemplo en los concursos públicos.
¿Leyes que desfavorezcan a los jóvenes?
P. A: Sí, por ejemplo, ahora es muy complicado que las empresas jóvenes accedan a una gran parte de concursos públicos por las condiciones impuestas, que las empresas jóvenes no pueden cumplir.
¿Cómo valoras la puesta en marcha del plan de estímulo económico y apoyo al emprendedor del gobierno? La nueva aplicación del IVA de caja para las pymes o las cuotas reducidas para nuevos emprendedores, por ejemplo.
P. A: Celebramos estas medidas pero desde CEAJE creemos que se quedan cortas. Por ejemplo, la aplicación de las cuotas de 50 euros a la Seguridad Social para jóvenes durante seis meses no es suficiente. Nosotros reivindicamos que sea de al menos 24 meses. Hay que trabajar para eliminar barreras a la hora de emprender y consideramos que son medidas urgentes en las que no se habla de competitividad o sostenibilidad de las empresas de nueva creación…y una vez creadas las empresas, se tienen que mantener.
En esa ley de emprendedores de la que tanto se habla, ¿qué crees que debería priorizarse?
P. A: Tiene que ser una ley que estudie de manera permanente y constante las necesidades de emprendedores y empresarios, con el fin de que todos los territorios trabajen para crear empresas. Esto permitiría que se redujera el desempleo en España…
En mi opinión, esta ley debería contemplar tres problemas básicos en nuestro país: el acceso a la financiación, la eliminación de trabas burocráticas y la dignificación de la imagen del empresario y del autónomo en general.
Entonces, dirías que estos son los mayores problemas que se encuentran los empresarios y emprendedores a la hora de montar una empresa?
P. A: Sí. A parte de estos tres problemas, es necesario que se cree un sistema que facilite el emprendimiento, un ecosistema emprendedor, y para ello ayudaría mucho que se implantaran grandes multinacionales en nuestro país. Tampoco existe seguridad jurídica y se necesita una administración eficiente.
En España, sólo existen unos 32.000 autónomos de menos de 25 años ¿cómo crees que se podría aumentar esta cifra?
P. A: Destacaría dos medidas: por un lado, que la tarifa plana de autónomos dure 24 meses. Animaría a parados y estudiantes a crear su empresa. Por otro lado, habría que apostar por la carencia en las facturaciones de las nuevas empresas. Por ejemplo, siguiendo el ejemplo de Alemania, donde las empresas no pagan impuestos hasta los primeros 12.000 euros facturados.
Y el acceso a la financiación, ¿cómo se podría facilitar?
P. A: Creo que este problema viene de la falta de control del Gobierno sobre las entidades bancarias. No se exige que parte de la actividad de los bancos esté dedicada a las empresas. Y también surge de la falta de credibilidad. Los bancos no se fían de los nuevos proyectos. En muchas ocasiones, los encargados de los bancos que deben estudiar los planes de empresa no los entienden y los estudian mal. No hay cultura empresarial…
Y en el tema de la financiación, ¿ayudan organismos como el ICO o ENISA?
P. A: Sí, están estos organismos, pero sus fondos se dirigen sobre todo a las empresas innovadoras. Y existen otros negocios que no son innovadores y que también son necesarios: comercios, farmacias, restaurantes…
Decías que falta más cultura emprendedora en España. ¿Cómo se fomenta?
P. A: Empezando por el ámbito escolar. Desde CEAJE realizamos campañas por escuelas de toda España, realizamos proyectos en los colegios para que los más jóvenes absorban la cultura de emprender.
Además, un aspecto en el que hay que trabajar a nivel educativo es el de la estigmatización social del fracaso. Hay que trabajar por la segunda oportunidad. La sociedad condena el fracaso, un fracaso que muchas veces no viene dado por que la idea sea mala, sino por otros condicionantes. Esta estigmatización del fracaso genera miedos a la hora de emprender. Hay que acabar con esto desde la educación, mejorar la imagen del empresario y aceptar que hay que dar segundas oportunidades a los emprendedores. ¡El fracaso a la hora de emprender es parte del aprendizaje! De hecho, muchos jóvenes empresarios que hoy triunfan destacan los fracasos que tuvieron cuando comenzaron y lo mucho que de ello aprendieron. Se trata de analizar el porqué de los errores y aprender de ellos.
Además de presidenta de CEAJE, eres empresaria desde hace años…
P. A: Sí, en 1996, cuando tenía 22 años, creé mi propia agencia de seguros en Zaragoza, y lo hice con una visión diferente a los que había en el sector: hice una correduría de seguros pero solo con una marca aseguradora y dirigida al sector de las empresas. Llevo 17 años como empresaria, asegurando los riesgos de las empresas. Empecé con una cartera de 0 y ahora tengo seis personas trabajando en la empresa.
¿Y tienes más proyectos empresariales de futuro?
P. A: Sí, tengo dos proyectos más o menos preparados que voy a poner en marcha en poco tiempo. Uno relativo a servilletas con mensajes y el segundo es una escuela de cocina para niños y jóvenes. Tengo los planes de empresa listos.
Antes hablábamos de los problemas de los jóvenes emprendedores que detectáis desde CEAJE. Pero en tu caso, ¿qué problemas te encontraste a la hora de emprender tu negocio?
P. A: Además del problema de financiación, del que ya hemos hablado, destacaría la madurez de los mercados. Con un proyecto nuevo es complicado competir, pero también hay que destacar que las empresas jóvenes cuentan con la ventaja de que, en general, funcionan con recursos mínimos, con estructuras más pequeñas y por tanto, menos costes. Recomiendo tener muy en cuenta el tema de la competitividad a la hora de emprender.
Antes destacabas que el fracaso sirve para aprender… ¿Qué sacamos de positivo de esta crisis?
P. A: Qué la confianza es vital, aunque las cosas estén mal, para prosperar es necesario que la sociedad y el mercado tengan confianza. Parece que estos índices de confianza están aumentando y esto supone un cambio en los entornos empresariales. Muchos empresarios con los que hablo afirman que reciben más peticiones de presupuestos, existe más motivación.
La crisis nos ha enseñado muchas cosas, sobre todo a no pensar en un modelo de negocio rígido, hay que adaptarse y saber reinventarse a las nuevas necesidades. También hemos aprendido a diversificar, entrar en nuevos sectores y así mejorar nuestra capacidad de riesgo.