Las tiendas de la franquicia Lola Botona son un buena oportunidad para invertir por experiencia en el mercado y magnitud de negocio. Gran parte de sus buenos resultados están gran margen de libertad que confiere a sus franquiciados.
La central de Lola Botona no exige royalties a sus franquiciados y sí da flexibilidad con sus proveedores. La franquicia requiere una inversión de 35.000 euros y aporta un asesoramiento constante desde la central con condiciones de servicio ventajosas. Son establecimientos de 50 m2, en poblaciones pequeñas que cuentan con la posibilidad de adaptar sus productos a las particularidades de la tienda y la zona. Desde la central, están convencidos que quien mejor conocerá las necesidades reales del entorno es el propio franquiciado. Por tanto será éste quien decidirá cuál es la gama más indicada para su negocio, y gozará de plena libertad para decidir qué productos trabajar y a quién comprarlos, únicamente deberá guardar fidelidad en el abastecimiento de los productos de mercería clásicos y de labores.