Una franquicia que solo te requerirá unas pocas horas a la semana. Así es Speed Queen, cadena de lavanderías autoservicio que destaca por tener sus procesos totalmente automatizados.
En la franquicia de lavanderías autoservicio Speed Queen prácticamente todos los procesos están automatizados, por lo que el franquiciado puede gestionar su negocio incluso a distancia, a través de un smartphone, una tablet o un ordenador.
Este negocio es sencillo y cuenta con una demanda creciente: sus locales de lavandería de autoservicio permiten al cliente realizar su colada de manera cómoda, sencilla y a buen precio.
Es el mismo cliente quien se encarga de hacer su propia colada: tan solo tiene que introducir su ropa en la lavadora o secadora que quiera e introducir las monedas. Sin más complicaciones. Fácil para el cliente y para el franquiciado, que solo debe asegurarse de abrir y cerrar las puertas del establecimiento por la mañana y por la noche, recoger la recaudación, gestionar las cuentas y supervisar cualquier servicio o trabajo de mantenimiento necesario en los equipos instalados. Así pues, unas pocas horas a la semana son suficientes para estas tareas. Además, no es necesario tener empleados fijos.