Tras trabajar como compradora de Servicios y Marketing en Font Vella (Danone), Leyla quiso montar un negocio propio y decidió que la franquicia le aportaba seguridad y facilidad en la gestión.
Emprendedora, licenciada en Administración de Empresas, madre y franquiciada de dos centros de Bye Bye Pelos en Barcelona. Ésta es, a grandes rasgos, una rápida descripción de Leyla Chaer, de 37 años. Tras trabajar como compradora de Servicios y Marketing en Font Vella (Danone), Leyla quiso montar un negocio propio, pero, ante la falta de experiencia, decidió que la franquicia le aportaba seguridad y facilidad en la gestión. “Además, acababa de tener a mi primera hija y quería poder combinar el tener un negocio y cuidar de mi hija. Esto con la franquicia me parecía mucho más factible”, explica.
Tras estudiar muchas franquicias, hablar con mucha gente y analizar el mercado, Leyla Chaer se decantó por Bye Bye Pelos. “Me dio mucha confianza el hecho de conocer a la Directora General de Bye Bye Pelos, porque habíamos negociado mucho durante mi tiempo en Font Vella, cuando ella trabajaba para otra multinacional”, detalla la franquiciada.
La ‘no crisis’ del sector
Desde que abrió su primer centro en Santa Coloma de Gramanet (Barcelona), han pasado casi dos años y Leyla califica su experiencia como muy positiva. La crisis no ha sacudido fuertemente a este sector, el de la fotodepilación. “Esto no quiere decir que nos salvemos por completo, pero hasta hace muy poco ni siquiera lo habíamos notado”, explica Chaer. Leyla detalla que han notado una pequeña bajada pero a “la gente le gusta cuidarse, y nuestros precios y nuestra convicción de querer dar el mejor servicio posible a la gente, hace que todo el mundo pueda permitirse nuestros servicios, aun estando en esta crisis económica”. Y Leyla va más allá: “Dada la experiencia de mis dos centros, pienso que es el mejor sector y marca posible para pasar la crisis tranquilamente”.
Bye Bye Pelos cuenta con casi 50 franquicias en toda España. Y con cada uno de los franquiciados, la enseña mantiene una estrecha relación. Siempre dispuestos para ayudar, la Central de Bye Bye Pelos celebra una Convención Anual de franquiciados, en la que se presentan todas las novedades del sector, los nuevos productos, se presentan las experiencias profesionales de importantes personalidades del mundo de la empresa... “Estas reuniones motivan mucho”, señala Leyla. Como novedad, Bye Bye Pelos, además, cuenta con un Comité de Ética, en la que participan franquiciados y gente de la Central para ir mejorando día a día en el funcionamiento de toda la empresa.
Leyla, que tiene sus dos franquicias en Santa Coloma de Gramanet y en el barrio de Sants de Barcelona, se encarga día a día de la supervisión de los centros, en los que cuenta con un equipo encargado de la gestión y la atención al público. Su inversión en Bye Bye Pelos le ha dado buenos resultados y por ello, se plantea ya la posibilidad de abrir algún otro centro más.