Frente a las crisis y el desempleo caben dos posturas, la complaciente o la combativa. La segunda es la que ha llevado a muchos emprendedores a embarcarse en un negocio de franquicia con todas las consecuencias y el apoyo de la central.
Mariano Melo tenía claro que la segunda opción era la que se adaptaba más a su personalidad, por lo que sin ningún tipo de experiencia previa en el sector de los consumibles informáticos, y no habiendo regentado nunca un comercio, decidió con la ayuda de su hijo David, quien sí tenía conocimiento en artes gráficas, que era el momento de emprender y de alcanzar juntos el éxito en un sector en el que “ambos estuvieran a gusto”.
Informarse antes de emprender
Después de conocer diferentes opciones, Mariano vio en Color Plus la marca que se ajustaba a sus intereses: “Lo que más me ayudó a decidirme que su imagen corporativa y la seriedad que me demostraron cuando contacté con ellos, ya que me facilitaron todo tipo de información, lo cual me dio una gran seguridad y me facilitó mucho las cosas”.
Pero no sólo con la información Mariano se hizo la idea de que esta marca de reciclaje y consumibles de tinta de impresión era la más adecuada para su inversión, conocer de primera mano las experiencias de otros franquiciados de Madrid, Guadalajara y Zaragoza le dio nuevos puntos de vista. Así, finalmente decidió abrir su tienda en la localidad madrileña de Fuenlabrada.
Era el comienzo de un camino no siempre fácil. Cuando se pregunta a Mariano sobre cuál ha sido el mayor inconveniente al que se enfrentó en los pasos previos a la apertura, este franquiciado no duda en mostrar su descontento por las pocas facilidades que se dan desde las diferentes Administraciones a los nuevos y pequeños empresarios, y más hoy en día cuando debido a la situación económica y al paro, las pymes cobran tanta importancia.
Satisfecho de su decisión
A la hora de hacer balance y tras varios meses de andadura en el mercado, este franquiciado se muestra satisfecho con cómo se está desarrollando todo: “Nuestra proyección está siendo Juventud exitosa Desde el comienzo de la cadena en 2008, esta franquicia especializada en cartuchos de impresión, sin olvidar material básico de oficina, ha visto aumentado su número de unidades, hasta llegar en la actualidad a las 24. Nos estamos dando a conocer mediante diferentes campañas publicitarias, pero sin duda sabemos que el boca a boca es lo que va a marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso de un negocio”.
El trato cien por cien personalizado que ofrece a sus clientes, junto con el esfuerzo para atender a toda clases de públicos es una de las razones para este buen funcionamiento, y así lo reconoce Mariano: “No tenemos pedido mínimo, y somos capaces de servir todos nuestros productos a domicilio, tanto los de carácter particular como los destinados a empresas”, así mismo “ofrecemos un servicio de gran calidad y a buen precio, tanto en los productos compatibles como en los originales de tinta, lo que nos permite diferenciarnos del resto de la competencia del mercado”.