Está demostrado que los trabajadores que aumentan sus conocimientos en idiomas tienen mayor acceso a un empleo, pueden mantener el que tengan e incluso algunos profesionales pueden ampliar su nivel retributivo.
Según la Comisión Europea, cada año miles de empresas desaprovechan oportunidades comerciales y pierden contratos por carecer de conocimientos de idiomas.
La cadena de centros de idiomas Hexagone cree firmemente en la formación como medida de futuro contra la situación de crisis. Y según su experiencia, muchas de las empresas que invierten en formación contemplan políticas que o bien eligen a sus proveedores únicamente por el menor coste, tirando prácticamente la inversión, o que después no controlan su efectividad, por lo que no corrigen los defectos.
En este sentido Hexagone ofrece programas formativos enfocados al mundo empresarial, con sus propias metodologías y enfoque pedagógico, adaptados a un desarrollo profesional. No en vano la compañía nació como academia de francés para la filial de Renault en España, y desde entonces ha dado servicio a empresas como Zara, Ferrovial, Decathlon, Indesit…
La enseña busca crecer mediante el sistema de franquicias, con la actual situación de crisis, porque la enseñanza de idiomas ha demostrado ser un sector que evoluciona de manera creciente. Y precisamente porque esta situación provoca que la formación sea cada vez más importante para encontrar un puesto de trabajo o para permanecer en él sin llegar a quedarse obsoletos.