Los negocios clasificados en este sector se caracterizan por las inversiones elevadas y los altos márgenes de beneficio.
¿Te atrae el mundo del fast food? ¿Quieres un restaurante especializado en comida rápida? En el sector del fast food, la franquicia cuenta con muchas enseñas con muy buenos conceptos y muy variados formatos. Se trata de un tipo de negocio exigente en inversión y en gestión, pero a su vez de altas facturaciones y márgenes. En 2013, según los datos de la Asociación Española de Franquiciadores, las enseñas españolas de fast food facturaron 2.595,7 millones de euros.
La financiación es clave en este sector, ya que las inversiones en maquinaria e instalaciones suelen ser importantes, además de requerir locales grandes para obtener volúmenes altos.
En cuanto al perfil del franquiciado, es importante que sea una persona con capacidad de dirección de grupos humanos en situaciones de alto volumen de trabajo. La rentabilidad está en los detalles. Es por ello que la formación se convierte en un pilar fundamental de estos negocios, en especial en lo que respecta al personal, uno de los activos más importantes a la hora que un restaurante funcione.
Dentro del Fast Food encontramos formatos centrados en diferentes productos: Bocadillerías y sandwicherías, kebabs, frankfurterías, hamburgueserías, productos de pollo, pizzerías e incluso sushi. Algunas de las marcas más conocidas de fast food en la franquicia son McDonald’s, Subway, Domino’s Pizza, KFC, Pans & Company o Rodilla.