Si por algo destaca la marca Jijonenca es por el peso de su marca, el valor que aporta al consumidor con sus productos exclusivos y la tradición de una empresa familiar que se ha hecho con el mercado. Así es La Jijonenca. ¿Quieres formar parte de un proyecto de franquicia en el sector de la restauración que funciona?
Con La Jijonenca ganas en calidad, solidez empresarial y negocio. La franquicia de heladería, que cuenta con una tradición heladera de más de 40 años, ofrece a sus franquiciados un negocio extenso y vivo con más de 1.100 puntos de venta en todo el territorio nacional del que pueden formar parte. Las ventas son la clave de su éxito, La Jijonenca basa su producción en dos líneas de negocio: helados y turrones, ambos con una amplia gama de variedades, que se renuevan anualmente. Así es como hacen caja durante todo el año. Además, son maestros artesanos, trabajan en la elaboración de sus productos con ingredientes de primera calidad, manteniendo un proceso que garantiza su total higienización con las tecnologías más avanzadas. Lo más positivo de esta marca no es solo la consistencia de la marca en sí, sino la calidad que emana de su oferta gastronómica; calidad garantizada con la norma UNE EN ISO 9001. Sus clientes y franquiciados se benefician de un eficaz servicio de distribución que avala en todo momento el mantenimiento de la cadena de frío y han implantado el sistema APPCC (Análisis de Peligros y Puntos de Control Críticos), para garantizar la seguridad alimentaria de todos sus productos.
Los locales de La Jijonenca se ajustan también a las necesidades de los emprendedores, con diferentes tamaños, tanto si se quiere un espacio pequeño para ofrecer take away a sus clientes, como si se opta por un establecimiento de unos 100 m2. Sus locales funciona perfectamente en todo tipo de entornos, pero especialmente en aquellos de paso como calles peatonales, áreas comerciales, playas, centros comerciales...