La franquicia Schmidt Cocinas se caracteriza por su liderazgo en un sector que conoce a la perfección: son fabricantes de muebles de cocinas integradas, tienen una gran capacidad para adaptarse a las necesidades del mercado, y forman parte de un grupo sólido y bien posicionado.
Schmidt Cocinas y sus tiendas no necesitan presentación: su mobiliario específico es de los de mayor reconocimiento. No en vano estamos hablando dell primer fabricante francés y el quinto europeo que cuenta con el apoyo de un potente grupo industrial. Los futuros franquiciados de la marca se encuentran con la ventaja de trabajar con un líder, una gestión a medida y unos gastos controlados, sin cánones ni royalties. Los establecimientos se montan en el centro de las grandes ciudades o a las afuerdas, para dar cobertura a la amplitud de su catálogo. Entre las ventajas que acumulan, está el hecho de que todas las ventas se hacen sobre pedido; es decir, no hay stock; y los franquiciados se benefician de un margen atractivo del 43% bruto. Las tiendas Schmidt Cocina proporcionan un retorno rápido de la inversión: de media, una tienda Schmidt permite obtener un retorno de la inversión en tan sólo 2 años.