El nuevo local es el décimo para el grupo Restafran y muestra una imagen renovada dentro de su plan estratégico de expansión.
La cadena de restaurantes de cocina mediterránea, El Racó ya tiene prevista la apertura de su nuevo establecimiento en Barcelona, el décimo para el grupo y el cuarto que abre sus puertas en la ciudad condal. Este nuevo local, en el que se han invertido aproximadamente 500.000 euros, es el primero que el Grupo Restafran abre conjuntamente con un franquiciado y que se enmarca dentro de su proyecto de expansión a través de la modalidad de Franquicia Compartida.
La enseña, que se encuentra en pleno proceso de expansión, ha reunido en este nuevo establecimiento elementos innovadores en diseño e imagen, resultado de la evolución de los restaurantes El Racó en el mercado. “En este local hemos apostado por un cambio muy notorio; sabemos que la imagen de un establecimiento supone un impacto fundamental para todos sus clientes potenciales”, afirma la directora de Expansión de El Racó, Elisabeth Estebanell.
Situado en pleno centro de Barcelona, el nuevo Racó trabajará a dos ritmos diferentes: la franja horaria del medioadía y de la noche. Esto ha supuesto la recreación de dos ambientes atractivos para sus diferentes clientes. El objetivo de la cadena es trasmitir su concepto de evolución; no sólo en la imagen de sus restaurantes, sino también en su completa oferta de platos, el uniforme de sus trabajadpres y la implantación de las últimas herramientas informáticas.
Con 350 m² y quince personas en plantilla, Restafran quiere hacer de este establecimiento un nuevo buque insignia para la enseña.
Esta fórmula de la franquicia compartida supone una alternativa para aquellos emprendedores dispuestos a invertir en el negocio pero que no desean estar al frente del restaurante Mediante esta fórmula de franquicia, El Racó facilita a los emprendedores la gestión del negocio y las operaciones del día a día y les permite compartir la inversión en un negocio atractivo con la garantía de una gestión profesional y garantizada.
Expansión
El Racó suma 10 locales abiertos y ha conseguido desarrollar un proyecto profesional durante más de tres décadas, definiendo y manualizando todos los aspectos del negocio desde el principio. Este desarrollo tan exhaustivo les llevó a ser, en su día, una de las primeras cadenas de restauración nacional que apostó por su expansión en franquicia en nuestro país.
La enseña pretende crecer a un ritmo de cuatro nuevos restaurantes anuales, dando prioridad en las ubicaciones a las principales ciudades del país.
La diversificación de su cocina es la clave del éxito de sus restaurantes. Ésta les ha permitido, durante más de dos décadas, luchar contra la estacionalidad del sector, fidelizando a su clientela, que encuentra en sus locales la forma más sencilla de comer variado y con calidad a un precio muy competitivo. El ticket medio de los restaurantes de El Racó está en los 11 euros por persona sobre carta.
En los establecimientos de El Racó se puede consumir una amplia oferta de calidad de pastas, ensaladas, carnes, pizzas y crepes. El Racó dispone de una cocina central donde preelabora los distintos platos de la carta facilitando el trabajo en los establecimientos; además, también dispone de un departamento de I+D que se encarga de dotar de imaginación los distintos platos que se consumen, tanto en la elaboración de los productos como en su denominación.
Antonio Bachiller, artífice de la cadena de restaurantes El Racó, abrió su primer establecimiento en el año 1975 instaurando una nueva forma de entender la restauración, cargada de productos novedosos y de una cocina imaginativa con la máxima calidad. Desde el primer momento, se decidió a prescindir de la figura del cocinero, apostando por la creación de un moderno obrador central. Las ventajas de esta decisión se dejan ver en el control exhaustivo de los costes, reduciendo mermas y errores.
Para montar un establecimiento de El Racó se precisa un local con unas dimensiones aproximadas de 200 m², en poblaciones que alcancen los 30.000 habitantes. La inversión roda los 453.900 euros.