Desde 2019 Brooklyn Fitboxing dona el 1% de su facturación a proyectos solidarios según la energía que generan miles de personas con sus golpes al saco de boxeo. La compañía española es una abanderada de una nueva manera de entender la experiencia de cliente recogiendo los intereses de las nuevas generaciones, que abogan por más solidaridad en todos los campos.
Contribuir a la disminución de la desnutrición infantil, construcción de escuelas dignas en Sierra Leona y ayudar en la protección de los océanos y la reforestación, son algunas de las causas por las que cada día miles de personas entrenan con Brooklyn Fitboxing.
En los centros de esta innovadora compañía española se practica boxeo sin contacto y, gracias a los sensores presentes en los sacos de sus clases, se otorga una puntuación a cada asistente a la sesión. Según la fuerza y la sincronización con la que se ha pegado al saco se dan puntos de karma, que la compañía convierte en financiación para proyectos solidarios. Esta iniciativa está presente en 138 centros de 10 países, llegando a más de 30.000 personas que entrenan y donan su energía.
Esta iniciativa se aleja de las campañas puntuales de colaboración con ONG e incluye la solidaridad en el propio ADN de la compañía. “Actualmente no basta con hablar de problemas como la lucha contra el cambio climático o las desigualdades en fechas concretas, nos tenemos que involucrar de una manera más directa. Siempre vivimos en la misma realidad, no podemos darle la espalda hasta que llegan fechas como la Navidad”, explica Juan Pablo Nebrera, socio-fundador y CEO de Brooklyn Fitboxing.
Las nuevas generaciones aprecian la conciencia social de las empresas, pasando esto a ser un punto clave a la hora de elegir comprar en una u otra marca. Por ejemplo, según un estudio de la compañía Millenial Branding, el 76% de los estadounidenses menores de 30 años están interesados en colaborar con una ONG. Asimismo, otro 76% están preocupados por las cuestiones climáticas y estarían dispuestos en realizar algún voluntariado relacionado con este tema.
Brooklyn Fitboxing colabora con cuatro ONG: Médicos Sin Fronteras, Save The Children, Mission Blue y Tree-Nation.
La idea de ligar entrenamiento con solidaridad parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas con los que Brooklyn Fitboxing se ha alineado. Estas guías de buenas prácticas se basan en la idea de que el progreso económico ya no se puede evaluar sin tener en cuenta la inclusión social y la sostenibilidad ambiental.