Tras una experiencia de más de 40 años en el sector, este grupo decide lanzar su concepto de negocio como una cadena referente en el sector del alimento congelado.
La Banquisa, red andaluza de establecimientos especializados en alimentos congelados, comienza su expansión en franquicia. Recientemente ha sido inaugurada la primera tienda especializada tipo que va a servir para exportar el modelo de negocio que opera bajo esta marca. Se trata de un proyecto de creación de cincuenta tiendas en unos cinco años que, creciendo inicialmente mediante formación de cadenas en zonas geográficas seleccionadas, se podría extender mediante “masters” hacia todo el territorio nacional.
Esta enseña aporta una dilatada experiencia de cuarenta años en el sector del congelado. La simiente de ésta empresa familiar vino de la mano de su fundador Miguel Guerrero Perdiguero. En 1968 decidió cambiar su profesión de Patrón de Pesca de Altura para aventurarse en el mundo empresarial. Llevó a cabo un proyecto de negocio de venta mayorista de pescados junto al Saladero Viejo de Torre del Mar (Málaga) durante la semana y el fin de semana aprovechaba para comprar marisco y cocinar sus productos para los restaurantes de la zona.
La creación de un almacén central de compras y la sala de elaboración de productos de la pesca, donde se empezó a fabricar los productos propios, fue el detonante de un negocio próspero no alejado de riesgos y esfuerzo. En la actualidad, la empresa que fundó Miguel hace cuarenta años, es un grupo de empresas que hoy dirigen sus hijos, dando empleo a cuarenta y dos personas y tocando distintas ramas de actividad.
La compañía, que cuenta con 10 establecimientos, busca asociados que quieran labrarse un futuro en el sector de la alimentación, tengan afinidad por el sector y gestione su establecimiento con la misma exigencia que la compañía cuida su cadena. “Gracias a la tecnología informática también pensamos en el franquiciado inversor, pudiendo monitorizar sus unidades franquiciadas en tiempo real. Los establecimientos La Banquisa están configurados con maquinaria y tecnología de última generación, ofreciendo así al cliente final un producto de primera, y al franquiciado la posibilidad de obtener un establecimiento totalmente informatizado y con una cuidada imagen corporativa atrayente en sus establecimientos”, explica Miguel Ángel Guerrero, consejero delegado de La Banquisa.
La inversión total que hay que desembolsar para ser franquiciado es de 46.000 euros, que incluye un canon de entrada de 8.000 euros. Además, el franquiciado deberá hacer frente a un royalty del 2% de la facturación y a un canon de publicidad de 150 euros/mes. El contrato se establece por un periodo de 5 años renovables y si el franquiciado lo necesita se le ayuda en la financiación.
Loas planes de expansión que la compañía se ha marcado son los de abrir 50 tiendas en cinco años. No obstante, el ritmo de aperturas se pretende hacer de forma consolidada y segura. “Es decir, el ritmo de aperturas va a ser el que permita ir absorbiendo la central tanto por los problemas de logística como de fabricación del producto se requiera. Además, se quiere ser muy exigente en la selección tanto del perfil del emprendedor como del local”, explica Guerrero.