Subway, la cadena de bocadillos conocida en todo el mundo, tiene un proyecto de crecimiento muy ambicioso en nuestro país.
Para llevarlo a cabo la enseña quiere potenciar a sus agentes de desarrollo, la figura empresarial que utiliza la compañía a nivel internacional para extender su concepto de negocio.
Para implantar este nuevo plan de desarrollo la enseña ha dividido a la Península en 12 zonas, de las cuales actualmente están cubiertas cuatro a través de tres agentes de desarrollo: Aragón, Canarias, Cataluña y Levante. El objetivo de la cadena es ampliar este equipo de profesionales en función de su crecimiento nacional.
La expansión de la zona centro pasa a ser responsabilidad directa de Subway, a través de un agente de desarrollo en Madrid, en sustitución a los anteriores gestores y Master Franquiciados. En esta región la cadena tiene previsto potenciar su presencia gracias al trabajo de expansión que los nuevos responsables de la compañía tienen previsto llevar a cabo.
El agente de desarrollo es un emprendedor independiente que, además de hacerse responsable del crecimiento de la enseña en una zona determinada, se encarga de proporcionar todo el soporte necesario a las unidades operativas y funciona como enlace entre el franquiciado y la central.
Todos los agentes de desarrollo son ó han sido franquiciados de Subway y tienen la experiencia necesaria en la compañía para garantizar su efectividad en este puesto. Asimismo, desde la central se imparte un programa especial de formación para reforzar sus conocimientos.
Este modelo de crecimiento es el que la compañía ha implantado a nivel internacional y le ha llevado a obtener el liderazgo mundial con más de 28.900 establecimientos franquiciados.
La información necesaria para instalar una franquicia Subway es de unos 125.000 euros para locales con un mínimo de 50 metros cuadrados ubicados en poblaciones con un mínimo de 30.000 habitantes.