Entretapas y Vinos... Cuando cocinar es un éxito

Experiencia, calidad y una cocina original que cuida al máximo los detalles, con creatividad y una amplia oferta gastronómica y vinícola, con estas bases Entretapas y Vinos se ha convertido en una de las enseñas de restauración de mayor crecimiento. Con más de 41 establecimientos abiertos, ¿quieres ser el próximo? "Nuestro objetivo es lograr el 100% de satisfacción de cada cliente en cada uno de nuestros establecimientos, a través de una cultura que los sitúa siempre en primer lugar", explica Susana Braza, uno de los responsables de la cadena de restauración Entretapas y Vinos. Y, realmente, pueden decir que lo han conseguido. Con dos años de vida como franquicia y una dilatada experiencia en el sector de la restauración, esta cadena vive un crecimiento espectacular, reflejado en su volumen de aperturas –más de 40 establecimientos- y en el número de clientes. "Desde nuestros inicios, hemos tenido como objetivo ofrecer un concepto de negocio diferente, a través del cual satisfacer plenamente las necesidades tanto de los clientes como de nuestros franquiciados", apunta Susana Braza. No ha sido casualidad. Como grupo, FH sabía lo que quería en todo momento, cómo conseguirlo, que directrices poner en marcha para que sus locales se destacaran por encima del resto. Y lo hicieron. Para empezar, dotar de originalidad el ámbito de la restauración con una extensa diversidad gastronómica, platos elaborados con productos de primera calidad y acompañados por una amplia variedad de vinos.

Cocina de nueva generación
"Hacemos una cocina de nueva generación. Nuestra oferta es muy original, se basa en la fusión de recetas tradicionales con los platos de la denominada cocina creativa, todos ellos elaborados con ingredientes de primera calidad", puntualiza Susana Braza. GFH desarrolló este concepto innovador, buscando la diferencia. No sólo con una excelente cocina de contrastes avalada por profesionales y público, sino sobre todo por el sistema de gestión que la enseña ha puesto en marcha para sus establecimientos y que se sustenta en la experimentación y rentabilidad. No en vano, el equipo que ha dado forma a este proyecto cuenta ya con una sólida experiencia en la gestión de negocios de hostelería a lo largo de una exitosa trayectoria profesional que se remonta a lo largo de varias generaciones. La diversidad gastronómica de Entretapas y Vinos está compuesta por una cocina de nueva generación a precios asequibles. La cadena completa su oferta con una amplia variedad de vinos procedentes de las mejores cosechas españolas.

Es más, la compañía realiza constantes inversiones en investigación y desarrollo con el objetivo de rentabilizar al máximo la inversión de sus franquiciados, "esto nos ha llevado a ser una de las mayores redes por índice de crecimiento". Con el objetivo de renovar su carta, Entretapas y Vinos introduce constantemente nuevas recetas a su carta de productos. Todos los restaurantes de la enseña son atendidos por grandes profesionales de la hostelería que, unido a una fácil operativa, garantiza una excelente atención al cliente. Y este es otro de los aspectos claves de esta cadena. Al menos, de los más atractivos, ya que se centran en conseguir la satisfacción del cliente. En este sentido, la central proporciona una amplia formación al personal de todos los restaurantes para garantizar un excelente trato al público.

Decoración minimalista
La cuidada imagen de marca patente en todos sus establecimientos y una original decoración minimalista, a años luz de lo que prima en el sector son referentes junto a la calidad de sus servicios, de este concepto de negocio. La idea era crear un estilo peculiar que rompiera con lo ya establecido aportando nuevas posibilidades al mercado. Bajo lo que ellos mismos denominan. 'tabernas de nueva generación'. "Además, conocemos a fondo el punto de vista técnico de esta labor de expansión empresarial, tanto desde una perspectiva estratégica, como desde los requerimientos económico-financieros necesarios para conseguir un proyecto efectivo y viable, gracias a la experiencia profesional adquirida en labores de consultoría del sector de la franquicia", destaca Susana Braza.

La decoración de la enseña se define también por su carácter innovador, a la vez que práctico y funcional, que evoca a las salas de degustación de las grandes bodegas. De esta forma, rompen con la monotonía reinante en el sector de la restauración, aportando un estilo más diáfano y cómodo, reduciendo la inversión que se destina a esta partida. "Es un negocio rentable donde el franquiciado es capaz de recuperar la inversión en, aproximadamente, un año y medio".

De hecho, la enseña se cimienta sobre unas bases muy instructivas: la calidad de sus servicios y de sus productos, la excelente relación calidad-precio, el trato profesional a la clientela y la formación exhaustiva de su personal son elementos que se combinan entre si para lograr unos buenos resultados. Sin mencionar que las características de este negocio contribuyen a que la enseña sea mucho más asequible que otros negocios del sector.

Para montar un establecimiento de Entretapas y Vinos se necesita un local de entre 120 y 300 m², ubicado en una zona de gran afluencia de público. Las áreas de ocio, laborales o residenciales, las calles peatonales o situadas en primera línea son las zonas donde más resultados obtienen estos establecimientos. "Es así como potenciamos la viabilidad de nuestro negocio desde el primer día", subraya Torrente.

De lo que no cabe ninguna duda es que Entretapas y Vinos ha iniciado una nueva etapa en el ámbito de la restauración: un concepto que nace fruto de la experiencia y no de la casualidad.

Buscando el éxito

• Cocina de nueva generación: fusión de recetas tradicionales con los platos de la denominada cocina creativa.
• Elaboración de platos con productos de primera calidad
• Ampliaoferta vinícola y gastronómica. Aspecto claramente diferenciador frente a la competencia, el personal asesora directamente a cada cliente acerca del tipo de vino más adecuado para cada plato.

• Locales de entre 120 y 300m2
• Población mínima de 40.000 habitantes
• Ubicación en zonas de ocio, oficinas y donde haya gran tránsito peatonal.
• Inversión que ronda los 90.000 euros y hasta los 150.000 euros

Qué les hace diferente

• Su cuidada imagen de marca, patente en todos los establecimientos de la cadena
• Decoración de la enseña con un enfoque minimalista e innovador, a la vez que práctico y funcional que permite disminuir considerablemente la inversión necesaria en decoración.
• El proyecto de arquitectura interior cuenta con diversos elementos decorativos de gran impacto visual: metales, maderas, barro, aportando fotografías de gran belleza estética con el objetivo de conferirle un pretendido aire de exclusividad y diseño.
• Excelente trato al público que visita sus establecimientos. Se cuida al máximo la atención al cliente.
• Amplia formación del personal, tanto de barra como de cocina, de todos los restaurantes, con programas teórico-prácticos en los que se dan a conocer los procedimientos de trabajo y la filosofía de la franquicia desde la central,
• La compañía realiza constantes inversiones en investigación y desarrollo, con el objetivo de renovar su carta y rentabilizar al máximo la inversión de sus franquiciados.

Sigue las claves

• Imagen corporativa: común en todos sus establecimientos, la misma carta, los mismos productos, los mismos sistema de gestión e información, los mismos proveedores, todos estos factores y algunos más dotan de fuerza al conjunto de establecimientos.
• La Estrategia de marketing: les permite diferenciarse de la competencia sorprendiendo y ganando constantemente clientes.
• Selección de Franquiciados: Importante experiencia en el reclutamiento, la selección y la formación de franquiciados cualificados, así como la relación de mutua confianza con cada uno de ellos, son factores determinantes de su éxito.

Redacción Mayo 2004