Nuestra historia empieza años antes de crear el primer D’kebabs por una gran pasión por la cocina internacional. Esta pasión hace que en 2002 descubramos el kebab y aunque para nosotros era un gran desconocido en aquel momento, comenzamos a investigar por los pocos restaurantes de cocina turca que había por aquel entonces en la geografía española. De todas aquellas idas y venidas formamos un sueño, montar nuestro propio kebab pero un kebab distinto a lo que habíamos visto en esos años, un kebab hecho desde la pasión por la comida turca.
Nuestro secreto desde el principio fue elaborar nuestras propias salsas además de desmarcarnos del típico restaurante turco. Queríamos dar un toque exclusivo que no se pudiera conseguir en ningún otro sitio, tener nuestra propia identidad por eso pronto empezamos a ampliar la carta con diferentes sabores en los platos y salsas de diferentes estilos.
Pronto D’kebabs empieza a crecer como negocio debido a la demanda de clientes siendo uno de los restaurantes más rentables la ciudad lo que nos impulsa a cambiar a un local más grande, de forma que se pudieran cubrir las necesidades de los clientes pero también buscando cubrir nuestras propias necesidades que nos surgen debido a la constante idea de mejorar, nunca dando paso al inmovilismo que puede provocar un negocio que funciona.