El torrefactor luso fabricará un nuevo blend exclusivo para la cadena.
Café de Indias ha suscrito una alianza estratégica con el grupo portugués Delta Cafés, por el cual éste proveerá a la cadena de cafeterías especializadas de un nuevo blend específico y exclusivo para todos sus establecimientos. Este acuerdo es el primero que suscriben ambos grupos y representa la plataforma de lanzamiento para el desarrollo de nuevos planes de expansión y comerciales a medio/largo plazo en la península Ibérica.
En virtud de este acuerdo, Novadelta S.A.U. -propietaria de la marca Delta Cafés y responsable de la torrefacción de café y otros sucedáneos- suministrará en este primer año a Café de Indias alrededor de 40.000 kilos de café, de manera que la enseña andaluza pueda abastecer a los 41 locales que actualmente tiene operativos en España. En el año 2010, se prevé que el suministro total acumulado para la enseña supere el medio millón de kilos de café.
Este blend, que está realizado a partir de granos de calidad premium cien por cien arábicos, se producirá y empaquetará en la fábrica que Delta Cafés tiene en Campo Maior (Portugal). En la actualidad, ésta es la principal planta torrefactora de café de la península Ibérica, con una moderna tecnología y capacidad para torrefactar y empaquetar 167.500 y 232.500 kilos diarios, respectivamente.
Esta alianza se enmarca dentro de la política de expansión y comercial que ambas empresas están desarrollando en la península ibérica con el objetivo de liderar sus respectivos sectores en el plazo de diez años. En línea con esta estrategia expansiva, Café de Indias confía cerrar en los próximos meses nuevos acuerdos con proveedores multinacionales, que le permitan aprovechar nuevas sinergias, así como aportar valor añadido a la cadena y a sus franquiciados.
Asimismo, esta alianza con un proveedor certificado responde a la necesidad de Café de Indias de adaptar sus productos al concepto de "trazabilidad alimentaria" regulada por el Parlamento Europeo y que entrará en vigor en 2005. Esta normativa obliga a identificar el origen de las partidas de cafés, así como el desarrollo de los distintos procesos sufridos por el grano de café desde su manipulación en fábrica hasta el empaquetado, transporte y servicio final.