Muusse Milkshake ha encontrado su hueco en el mercado gracias a su concepto de negocio especializado en batidos de calidad y a sus locales ambientados en los años 50 americanos. Sus clientes repiten.
La especialización es la clave de este negocio: la franquicia Muusse Milkshake es un negocio de hostelería donde los protagonistas son los batidos, elaborados con leche, helado y el topping que elija el cliente. Todo en una ambientación propia de los años 50 americanos.
Con esta especialización, la enseña ha encontrado un hueco en el mercado, adaptándose a los gustos del cliente, quienes repiten gracias a la experiencia que reciben al entrar en uno de los establecimientos Muusse.
Como negocio, Muusse Milkshake destaca por ser una franquicia económica, que precisa una inversión muy ajustada (30.000 euros). Es además un proyecto interesante por la sencillez de su gestión.