Con una inversión pequeña y la formación necesaria en materia de nuevas tecnologías puedes convertirte en operador de telecomunicaciones de la franquicia Wi-Net; una oportunidad de autoempleo, de fácil gestión y compatible con otras actividades.
Convertirse en operador de telecomunicaciones con una red propia y rentable es sencillo con la franquicia WI-NET que ofrece a los emprendedores una oportunidad de negocio, asesoramiento y seguridad para dirigir su propia franquicia e iniciarse en el mundo de las telecomunicaciones. La inversión necesaria para convertirse en franquiciado de Wi-Net es de 18.000 euros, sin necesidad de abonar canon de entrada o royalties. Esto supone un negocio fructífero, sin necesidad de local, rentable y con mucha capacidad de abarcar mercado ya que sus servicios se enfocan a un público muy amplio, en poblaciones a partir de 5.000 habitantes. Con la franquicia Wi-Net te encargarás de dar servicios de internet a tus clientes, enfocados a Internet Rural; Internet Urbano; Telefonía móvil y fija y proyectos especiales.
De hecho, los franquiciados de Wi-Net desarrollaran actividades comerciales como la captación de clientes, acciones publicitarias y de difusión de los servicios y actividades técnicas: instalación, ampliación, mantenimiento de la red y resolución de incidencias.