La franquicia Adlant es elegida por los emprendedores que quieren poner en marcha su propio negocio por la rápida recuperación de la inversión inicial, ya que la cantidad que el asociado debe aportar es de sólo 8.000 euros. Además los asociados no necesitan tener un local para desarrollar su labor, sino que basta que tengan un vehículo con el que desplazarse y que les servirá de almacén.
La franquicia Adlant está diseñada para que el emprendedor pueda tener su propio negocio y dirigirlo con una inversión mínima: 8.000 euros. Desde la central abaratan mucho los gastos para conseguir este fin: “ofrecemos una atención personalizada a nuestros asociados. Estamos en permanente contacto con ellos por diferentes canales. Nos importan sus dudas y preocupaciones y tratamos de dar solución a sus demandas en el menor tiempo posible”.
Qué aportan desde la central de Adlant al franquiciado
- La central se encarga de proporcionarles ropa de trabajo, que ayudará a la identificación del asociado como parte de la enseña.
- También les suministra un ordenador portátil
- Cuenta con todo el material mecesario: tarjetas de visita, trípticos informativos y cajas rotuladas para los puntos de recogida entre otras cosas.
Por qué es rentable abrir una franquicia de Adlant
Con la franquicia Adlant, los asociados disponen de dos negocios en uno. Por un lado la recogida de consumibles y componentes informáticos para su reciclaje y por otro, la venta de consumibles originales.
Dentro del sector de los consumibles se distingue por operar durante todo el ciclo de vida del producto: desde su venta hasta su recogida final. Esto hace que recuperen la inversión en un en un corto espacio de tiempo. Es una franquicia rentable, constatado, con riesgo prácticamente cero para el franquiciado y que se mueve en un sector de negocios sostenibles. Además es una empresa que sigue creciendo día a día de una forma imparable.
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