La franquicia Crepería La Boheme está a punto de inaugurar la temporada de más clientes del calendario. Cada año, tras la Semana Santa, la crepería aumenta notablemente el número de clientes, gracias al buen tiempo y a la llegada de turistas europeos, que aprovechan para iniciar su temporada de sol y playa.
Por ello, durante estos días se aumentará el número de camareros, para poder atender adecuadamente a los clientes. El gerente de La Boeheme, Thierry Carrayol, señala que “estamos siendo previsores en función de lo que ocurre cada año; en la pasada semana Santa, a pesar del mal tiempo que hizo en todo el país, las ventas aumentaron considerablemente”.
Así pues, este empresario ve con optimismo los próximos meses, a pesar de la situación de crisis económica que soporta el país. De hecho, según el gerente de La Boheme, Thierry Carayol, “auguramos un verano de importantes éxitos”.
En este sentido, la crepería que regenta Thierry Carrayol se encuentra a pleno rendimiento y no cesa en su empeño de ofrecer comida de calidad, basada en la fusión de la dieta mediterránea y la comida francesa. “Gracias a la variedad de productos que ofrecemos a nuestros clientes, hemos conseguido que el restaurante se llene tanto de niños pequeños con sus padres como de personas más mayores”, explica el gerente.
El secreto, según Carayol de esta enseña en su sector está en “la continua innovación, el buen trato hacia el cliente y todo ello no puede ser posible sin un equipo humano coordinado y satisfecho con su trabajo”. Este emprendedor enamorado de la buena cocina, innova en su carta cada cierto tiempo, con nuevas recetas que rescata en algunos de sus viajes internacionales. “Me gusta mucho viajar, conocer lo que se está haciendo en otros lugares en cuanto a comida y traer recetas innovadoras con las que sorprender a mis clientes”, explica.